MALAGA 28 May. (EUROPA PRESS) -
Izquierda Unida ha registrado en el Congreso de los Diputados una pregunta dirigida al Ministerio de Medio Ambiente para que éste informe de las actuaciones realizadas en la costa malagueña en 2005 y de las que se están acometiendo en 2006. Además, la coalición reclamó a la titular de esta cartera, Cristina Narbona, que explique "qué se está haciendo después de su anuncio de comprar terrenos del litoral para impedir su urbanización, entre ellos la zona de Arraijanal".
El parlamentario andaluz de IU Antonio Romero destacó la "importancia" de "recuperar la servidumbre de la zona marítimo-terrestre", ya que, según subrayó, "lo que está sucediendo en Andalucía es una operación donde la especulación urbanística, y en muchos casos la corrupción, está abriéndose camino, sobre todo en el litoral".
En este sentido, Romero advirtió, en declaraciones a Europa Press, de que en un informe reciente se plantea que "Málaga está a la cabeza en el porcentaje de litoral urbanizado de toda España".
"Estamos invadidos por un tsunami de cemento, que está convirtiendo nuestro litoral en una muralla gris, construida con los ladrillos de la especulación y, en muchas ocasiones, con el cemento de la corrupción", declaró, añadiendo que "esta marea negra se está extendiendo hacia el interior de Andalucía".
Romero afirmó que la Comunidad andaluza "no puede soportar esa vorágine especulativa", y, por ello, "la Junta de Andalucía y el Gobierno central, que son las administraciones competentes, deben actuar de forma conjunta y contundente".
Así, les instó a que "impidan la proliferación de macrourbanizaciones, que recalifican millones de metros cuadrados en suelos protegidos, agrícolas y forestales", e "impongan verdaderos criterios de sostenibilidad en los planes generales de ordenación urbana, para evitar así crecimientos urbanísticos que ocupen todo el litoral, que sean una barrera de las ciudades para su acceso al mar y que superen la capacidad de carga de un territorio".
En opinión del parlamentario andaluz de la federación de izquierdas, es necesario "un criterio para que los paisajes, los recursos naturales, las playas y la costa no soporten más especulación ni más corrupción urbanística".