Málaga.- Junta y Diputación inauguran las nuevas instalaciones del Centro de Drogodependencia de la barriada de La Luz

MALAGA 17 Mar. (EUROPA PRESS) -

La delegada provincial para la Igualdad y Bienestar Social de la Junta de Andalucía, Amparo Bilbao, y la vicepresidenta de la Diputación Marisa Bustinduy, inauguraron hoy las nuevas instalaciones del Centro de Tratamiento de Adicciones (CTA) de Málaga, situado en la barriada de La Luz y que atiende a los 52 barrios del distrito, cubriendo una población potencial de 111.869 personas.

La inversión destinada a este centro en 2006 por parte de la Junta de Andalucía es de 75.159 euros, mientras que la partida de la Diputación Provincial es de 91.086 euros.

La diputada delegada de centros de atención especializada, Carmen Lisbona, explicó que el CTA, que abrió sus puertas en el año 2002 atendiendo a 382 personas, prestó servicio el pasado año a 530 usuarios, realizó un total de 2.742 revisiones y e inició o reinició 141 casos.

Este centro, "el que más ha crecido en la provincia y el que mayor demanda tiene", según indicó la diputada, cuenta entre su equipo humano con un médico, dos psicólogas, dos trabajadoras sociales, un auxiliar de enfermería, un oficial de servicios internos y un vigilante de seguridad.

Por su parte, Bustinduy consideró que "la existencia de este centro, y no sólo la existencia, sino la apuesta por ampliarse, pone clarísimamente de manifiesto que realmente es un centro útil para la sociedad en general y, en particular, para este distrito, que tantas necesidades tiene".

Asimismo, añadió que este centro "entra también en el ámbito de los centros de atención especializada, donde la Diputación está haciendo un trabajo muy importante, una apuesta política por tener una sensibilidad muy especial con lo que significa trabajar con las personas que mayores dificultades tienen".

A este respecto, indicó que, "además de este centro, en relación a las adiciones también tenemos otro, donde la Diputación en la ciudad de Málaga está prestando servicio a más de 250 usuarios, que viven en la ciudad, y está generando un empleo de en torno a 200 puestos de trabajo".

Además, Bustinduy quiso resaltar la importancia de que las administraciones colaboren entre sí y pidió que "se pongan en común los esfuerzos para que el resultado obtenido sea el más beneficioso para los ciudadanos".

Por último, la dirigente socialista explicó que, en el ámbito de los derechos sociales, "tenemos que ser conscientes de que hay que ampliar la oferta para dar respuesta a las necesidades que existen".

Por su parte, la delegada provincial para la Igualdad y Bienestar Social de la Junta resaltó también que "esto es un ejemplo de buen entendimiento entre las instituciones", al tiempo que explicó que existen 15 centros de tratamiento ambulatorio destinado a la drogodependencia en Málaga y la provincia, "que pueden ser de titularidad privada o pública".

Bilbao puso de relieve que este tipo de centros de tratamiento ambulatorio desarrollan actividades importantes como son labores de "información, prevención y programas de reinserción social", al tiempo que establecen canales de coordinación con los distintos dispositivos implicados en la drogadicción, entre otras actuaciones.

Señaló, de igual modo, que desde la Junta existe un convenio con la Diputación Provincial de Málaga por el que se tienen tres centros conveniados: el centro base de Suárez, el de Palma-Palmilla y el de Mijas.

Asimismo, expuso que desde la Junta se realiza una inversión anual importante, que fue en 2005 de 1.700.000 euros, "distribuidos entre centros conveniados con la Diputación; con entidades privadas, que existen acuerdos con Cruz Roja, Proyecto Hombre, Alternativa Dos y Area, y con los ayuntamientos de Antequera, Estepona, Ronda, Vélez-Málaga, Marbella y Alora".

Por último, adelantó que, en unos dos meses, se presentará un nuevo proyecto para la zona de Palma-Palmilla, que cuenta también con un presupuesto importante por parte de la Junta de Andalucía.

USUARIOS DEL CTA

La diputada delegada de centros de atención especializada, Carmen Lisbona, señaló que los pacientes del centro son mayoritariamente los hombres, en concreto, en un 85%, frente al 15% de mujeres. Un dato que según explicó "curiosamente se repite estadísticamente en todos los centros de la provincia".

Asimismo ocurre con las edades de los pacientes, que, "además, coincide con el mayor índice de consumo", y varía entre los 25 y los 40 años.

Por otro lado, Lisbona explicó que "el 50% de los pacientes que inician el tratamiento solicitan ayuda por una adicción a la cocaína", y además, indicó que "la edad a la que piden ayuda suele ser a los 29 años". Por su parte, los consumidores de heroína y cocaína piden atención más tarde, en torno a los 39 años.

Sobre el nivel de exclusión social, Lisbona manifestó que los consumidores de heroína "están más excluidos socialmente", al tiempo que existe el doble de personas que viven en la calle consumidores de heroína frente a los de cocaína.