Acto en Málaga con motivo del Día Mundial de la Salud Mental - AFENES
MÁLAGA 6 Oct. (EUROPA PRESS) -
Representantes de Afenes y de distintas instituciones públicas y entidades en Málaga han participado este miércoles en un acto con motivo del Día Mundial de la Salud Mental, que se celebra el próximo domingo 10 con el lema 'Salud mental, un derecho necesario. Mañana puedes ser tú'.
En este acto, celebrado en la capital, se ha leído un manifiesto y una proclama con los que Málaga se suma a la defensa de la salud mental como un derecho "universal y necesario" y a la reivindicación de la puesta en marcha de acciones para acabar con las desigualdades que sufren las personas que presentan este tipo de problemas.
Así, en la proclama, leída por Carmen Sibaja, presidenta de la Asociación de Familiares y Personas con Problemas de Salud Mental, Afenes, se insta a incentivar la disminución de las desigualdades mediante estrategias y medidas "que favorezcan una buena salud mental en la población".
En este sentido, se pone de manifiesto la necesidad de poner en marcha acciones para paliar la desigualdad económica causante de problemas de salud mental, "con especial atención a los colectivos más vulnerables"; y también dotar al ámbito rural de los recursos "adecuados y necesarios, en igualdad de condiciones con el ámbito urbano".
Asimismo, se apuesta por incorporar la perspectiva de género en el abordaje de la salud mental y por implementar recursos específicos de atención a las mujeres; además de que se realicen campañas de concienciación en salud mental dirigidas específicamente a población infanto-juvenil y se trabaje en paliar la discriminación hacia las personas mayores.
También se reclama sensibilización y promoción de la salud mental desde el ámbito educativo y campañas de concienciación que contribuyan a erradicar las conductas racistas, a nivel social pero también institucional; así como frenar "las desigualdades y vulneraciones de derechos que se cometen cada día contra las personas con discapacidad psicosocial".
El manifiesto, leído por Emilio Bandera, persona con experiencia en primera persona en salud mental, defiende que "si hay algo que iguala a la condición humana, ese es el deseo de disfrutar de un buen estado de salud mental. Sin embargo, la despersonalización de la sociedad y la escasez de oportunidades han propiciado una realidad donde la imagen dominante es la desigualdad".
En este punto, se hace un llamamiento a los poderes públicos al diálogo y "para reclamar que la pobreza no sea un factor de riesgo a la hora de cronificar un problema de salud mental"; al tiempo que se reivindica "una mirada solidaria y una inversión consecuente" para que "el derecho a la salud mental no dependa del lugar de residencia".
La necesidad de hacer frente "a la múltiple discriminación hacia las mujeres con problemas de salud mental", mediante protocolos específicos de atención, y la apuesta por residencias de mayores "con servicios especializados en salud mental" para "en vez de soledad, ofrecer una experiencia positiva y enriquecedora" son otros de los mensajes lanzados en este acto.
Por otro lado, se pone el acento en "la irrupción de problemas de salud mental en edades muy tempranas", por lo que se pide "un mayor esfuerzo en investigación y compromiso público" y también la sensibilización en el ámbito educativo, llevando "el conocimiento sobre salud mental y el afrontamiento del estigma a todas las capas de la sociedad, empezando desde la base, la escuela".
"Los problemas de salud mental, y teniendo en cuenta el impacto de la pandemia, ya no son algo que les pasa a los demás, sino que son algo que nos afecta a todos: trabajar por la salud mental es trabajar por el bienestar de la sociedad y por nuestro futuro", concluye el manifiesto.