Málaga.- Testaferros de Roca dijeron al juez que éste daba órdenes, parecía el "propietario" y le llamaban "el jefe"

Actualizado: martes, 19 septiembre 2006 16:41

MALAGA, 19 Sep. (EUROPA PRESS) -

Montserrat Corulla, presunta testaferro del considerado cerebro de la trama de corrupción en el Ayuntamiento de Marbella (Málaga), Juan Antonio Roca, declaró ante el juez que "era obvio" que éste era la persona que daba órdenes y "mandaba", incluso por encima del titular del despacho de abogados de Manuel Sánchez Zubizarreta, también en prisión por esta causa, para, según el instructor, blanquear dinero. Otro de los imputados, Oscar Benavente, también presunto testaferro, aseguró que siempre se refería a Roca como "el jefe".

En su primera declaración ante el juez que investiga el caso, Miguel Angel Torres, incluida en el sumario al que tuvo acceso Europa Press, Corulla señaló que Manuel Sánchez le dijo que era un asesor y que "tenía que obedecerle en todo", hasta el punto de que, según dijo, actuaba "como si fuera propietario" del entramado societario creado por el despacho.

Esta imputada era administradora de la empresa Condeor desde 2002 y a través de esta empresa adquirió el Palacio de Saldaña, el Palacio de Villagonzalo y el hotel y los aparcamiento de Los Alcázares y el hotel La Malvasía; propiedades todas que el juez considera que forman parte del patrimonio de Roca.

En este sentido, señaló que en las actividades que realizaba al frente de Condeor, según el juez "pieza clave del entramado de Roca", éste "no le asesoraba sino que le daba órdenes". Además, apuntó que en muchas veces vio al ex asesor de Urbanismo "dar órdenes e indicaciones a los empleados" y también a uno de los titulares del despacho, que "prácticamente en ninguna" ocasión dio indicaciones a Roca.

Respondió que "sí" le resultaba extraño que el bufete de abogados realizara estos proyectos "por el volumen de las inversiones". Así, sobre Corulla, que ingresó en la cárcel en abril imputada por un delito de blanqueo y salió este mes de septiembre, el juez indica en el auto de prisión que se trata de la "principal" testaferro de Roca, quien destacó la importancia de ésta, con la que dice mantener "un trato continuo".

Para el instructor y según las distintas conversaciones incluidas en la causa, ella "sabe que el dueño de todo es el propio Roca y no Manuel Sánchez Zubizarreta o Francisco Soriano". De hecho, no pronuncia su nombre en las conversaciones, sino que se refiere al ex asesor como "éste" o "él"; además de que utiliza su vehículo cuando Roca no está en Madrid y él utiliza el despacho de ésta para reunirse con sus colaboradores.

Respecto al entramado, el juez señala en ese auto de prisión que Corulla sabe que "se utilizan desde el despacho de abogados una serie de estructuras societarias y de personas que aparecen sólo formalmente como testaferros para que no se pueda conocer el verdadero titular".

De hecho, añade que se coloca a personas "sin cualificación" como su propia secretaria, Ursula Quinzano "para cargos de importancia a cambio de 300 euros mensuales", según declaró.

EL JEFE

Por otro lado, otro empresario y presunto testaferro de Roca, Oscar Benavente Pérez, aseguró en la declaración ante el juez Torres que "siempre que se dirigía a terceras personas se suele referir a Juan Antonio como el jefe". Además, cuando hablaba con Roca, al que considera "muy amigo suyo", le denomina "Juan, Primo, Hermano o Rocky". Además, mantuvo en su declaración que "para sacar dinero le pedía permiso siempre a Don Manuel (Manuel Sánchez) y a Roca".

Para el juez, Oscar Benavente "a cambio de ingresos económicos, realiza por cuenta de Roca operaciones mercantiles y figura normalmente como titular de una serie de sociedades de las que desconoce todo y se limita a firmar por orden de los letrados del gabinete y de Juan Antonio Roca, como él mismo ha reconocido".

Considera también el magistrado que Roca "es el jefe de una organización dedicada al blanqueo de los beneficios ilícitos obtenidos durantes años por su actuación presuntamente delictiva en el Ayuntamiento de Marbella, empleando para sus fines y para mantener oculto su extenso patrimonio una serie de testaferros y un complejísimo entramado societario en varios lugares de España y dedicado a las más diversas actividades".

En opinión del juez Torres, los tres testaferros de Roca son: Oscar Benavente Pérez, Montserrat Corulla y Salvador Gardoqui, titular real de la empresa Maras Asesores, donde se ha intervenido gran parte de la documentación sobre presuntas comisiones, quien declaró ante el juez que las personas que mandan en dicha sociedad son Juan Antonio Roca y Oscar Benavente.

Antes de Maras Asesores estuvo trabajando en su despacho profesional en Madrid como licenciado en Derecho y abogado y, después trabajó en Manilva (Málaga). Le presentaron en las listas del GIL en las elecciones del año 2000, pese a lo cual no conocía a Roca.

Gardoqui precisó en la declaración judicial incluida en el sumario, al que tuvo acceso Europa Press, que se produjo tras su primera detención, ya que fue arrestado por segunda vez dentro de la segunda fase de la operación, que las participaciones de la sociedad Helioponto estaban a su nombre, pero que el dueño era Juan Antonio Roca.

Asimismo, señaló que Oscar Benavente le presentó a Roca y éste le propuso constituir una sociedad, así como que se pusiera como administrador. Gardoqui dijo que se limitó "a ir a firmar", pero negó haber intervenido en nada en la sociedad, porque, insistió, la persona que manda "es Juan Antonio Roca".

Para financiar las obras del Helipuerto, le dijeron, según declaró, que hiciera una factura que se correspondiera con una comisión por haber intervenido en una operación de venta, aunque realmente sólo hizo una factura y ni Maras Asesores S.L ni él intervinieron en dicha operación que no sabe "si se realizó o no ni por quién".