Málaga.-Tribunales.-Condenan a un hombre a un año por pegar a guardias civiles al ser detenido con droga para una fiesta

Actualizado: domingo, 23 diciembre 2007 13:36

MÁLAGA, 23 Dic. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia Provincial de Málaga ha condenado a un hombre a un año de prisión por un delito de atentado porque agredió a dos agentes de la Guardia Civil de la localidad malagueña de Casares cuando éstos lo detuvieron llevando droga, en concreto cocaína, que, según dijo, había comprado con el dinero recaudado entre varios amigos para consumir en una fiesta.

Al acusado, de 28 años, se le condena, además de por el delito de atentado, por dos faltas de lesiones a un mes de multa con cuota de cuatro euros diarios por cada falta, lo que hace un total de 240 euros. Asimismo, deberá indemnizar con 560 euros a uno de los agentes al que rompió las gafas graduadas, y con 1.251 euros al otro, a quien también fracturó las gafas y el reloj.

Los hechos tuvieron lugar sobre las 00.45 horas del 27 de marzo de 2004 después de que, según la sentencia a la que tuvo acceso Europa Press, los guardias civiles de dicha localidad se percatasen de que un individuo que circulaba en un ciclomotor había modificado su itinerario al advertir su presencia en la zona.

Por ello, los miembros de la Benemérita decidieron iniciar un dispositivo de vigilancia en la barriada de los Ponys de ese municipio, donde se habían perpetrado varios robos de vehículos con anterioridad. Comprobaron que en torno a las 01.15 horas el acusado intentaba abrir un coche estacionado.

El individuo trató de huir cuando los agentes quisieron detenerle y respondió de forma "violenta y agresiva" hacia éstos, propinándoles manotazos y un cabezazo en el pecho a uno de ellos.

Así, uno de los agentes resultó herido con erosiones en codos, rodillas y mejilla derecha, mientras que el segundo sufrió erosiones en manos, rodillas y una contusión en la región externa, agresión que le provocó 20 días de baja laboral.

Una vez reducido, al detenido se le efectuó un cacheo en el que se le encontró en el interior de uno de los bolsillos de los pantalones un monedero con seis papelinas de cocaína y una bolsita con la misma sustancia estupefaciente, que sumaban un total de 7,78 gramos. Además, ocultos en los calcetines portaba 490 euros.

La droga había sido adquirida por el acusado la misma mañana de la detención con el fin de ser consumida junto con otros seis amigos en una fiesta que tenían proyectada celebrar, según se declara probado. Por este motivo, la Sección Segunda de la Audiencia Provincial le absuelve de un delito contra la salud pública.