MÁLAGA, 31 Mar. (EUROPA PRESS) -
El futuro modelo para el servicio de limpieza de Málaga, tras la finalización en abril de 2017 de la actual concesión, será acordado con "el máximo consenso posible". Esto es a lo más que ha llegado el Pleno del Ayuntamiento tras aceptar el PSOE una enmienda del PP a su moción urgente y eliminar la exigencia de que la decisión final contara con una mayoría de dos tercios de la Corporación.
Aunque el alcalde, Francisco de la Torre, no se mostró este pasado miércoles en contra de esa mayoría reforzada, en la sesión plenaria de este jueves ha propuesto el cambio de dicho planteamiento por "el máximo consenso posible; no excluimos a nadie, en un diálogo leal y transparente". Una modificación que, no obstante, ha hecho que el resto de grupos voten a favor.
De la Torre ha abogado por "un proceso de diálogo entre los grupos políticos, los trabajadores y la ciudadanía para abordar el nuevo modelo". "No descartamos nada, ni siquiera la municipalización, aunque la experiencia existente no esté tan clara, pero tampoco la privatización total", ha afirmado.
También se ha acordado que el Ayuntamiento de Málaga negocie y cierre un convenio colectivo estable para las relaciones laborales en la empresa mixta Limasa, que evite futuros conflictos y huelgas.
Pese a la oposición del PP, han salido adelante los puntos relativos a reconocer el "fracaso" de la gestión de la limpieza tras la finalización de la huelga y que el gasto extraordinario se impute al concepto de asistencia técnica de los socios privados de Limasa, que tienen el 51 por ciento del accionariado.
No se ha aprobado, sin embargo, debido a los votos en contra del PP y de C's, reprochar al alcalde su "falta de implicación" durante la pasada huelga para su pronta resolución y sobre todo haber tomado parte de la concentración a las puertas del Ayuntamiento "en un clima violento", lo que los grupos de izquierdas consideran "una falta de respeto a los trabajadores en su legítimo derecho a la huelga".
En su intervención, De la Torre ha reiterado que el uso de la huelga por parte de los trabajadores de Limasa ha sido "innecesario" ante la situación laboral de la plantilla fija, que "durante estos años ha mejorado su poder adquisitivo un 13 por ciento, mientras que los funcionarios han bajado un diez por ciento".
"No tratamos de criminalizar a los trabajadores, sino de contar las cosas con transparencia", ha dejado claro el regidor. Ha opinado, incluso, que los propios empleados "se dan cuenta de que se han pasado" con la huelga, que ha calificado de "hostil, mortal y con una presión excesiva".
Ha vuelto a justificar la contratación de empresas externas, lo que "no era romper el derecho a huelga"; más aún, ha dicho que se trataba de "nuestra obligación" y ha insistido en que "el gasto es inferior a lo no pagado a los trabajadores por los días de huelga". También ha asegurado, en lo relativo a la concentración ante la Casona del Parque, que "siempre que alguien viene a mostrar respaldo o ser crítico, bajo".
De la Torre ha subrayado de nuevo que el origen de esta polémica radica en que la Junta de Andalucía, como Autoridad Laboral competente, "incomprensiblemente" no inscribió como convenio colectivo el principio de acuerdo que permitió la desconvocatoria de la huelga de diciembre de 2013.
Por su parte, la portavoz socialista, María Gámez, ha criticado que el alcalde, "en un clima que era clara y manifiestamente tenso, en vez de apaciguar las aguas, saliera al saludo triunfal a las puertas del Ayuntamiento para teóricamente sentirse respaldado en algo que no es cuestionable, como es el derecho a huelga".
Ha lamentado, igualmente, que no se haya aplicado "sin más" la sentencia del Juzgado de lo Social número 8, que establece como convenio colectivo vigente el de 2010-2012, anterior a los recortes, y ha acusado a De la Torre de "criminalizar" a los trabajadores, "enfrentándolos a los ciudadanos".
El viceportavoz de Málaga Ahora, Juan José Espinosa, ha insistido en que el acuerdo que permitió la desconvocatoria de la huelga es "un cierre en falso; se tenía que haber cerrado con un convenio colectivo".
Y al igual que el PSOE ha denunciado la "pasividad" de De la Torre y que "haya dilatado en el tiempo un asunto tan crucial". También ha cuestionado las críticas vertidas hacia la plantilla y no a los socios privados.
A lo que Espinosa se ha mostrado radicalmente opuesto ha sido a la propuesta socialista de que el futuro de la gestión lo determinara una mayoría de dos tercios, ya que "eso supone que dos grupos pudieran tomar la decisión", en referencia a PP y PSOE.
"Este grupo tiene una posición firme, que es la municipalización, nada de híbridos, de partir empresas, de privatizaciones; hablamos claro en la huelga y en la poshuelga", ha afirmado Espinosa.
El portavoz de Ciudadanos, Juan Cassá, ha dicho al alcalde que "no estuvo bien" que bajara a la concentración ante el Consistorio, pero también ha sido crítico con la oposición: "el PSOE se borró y Málaga para la Gente y Podemos --Málaga Ahora-- fueron unos auténticos irresponsables, echando más cerillas y leña al fuego".
Igual de crítico se ha mostrado con la parte privada de Limasa, que "se borró y apareció al final para llevarse sus contratitos y hacer caja", en alusión directa a FCC.
Por parte de Málaga para la Gente, su viceportavoz, Remedios Ramos, ha denunciado que "se intentara vulnerar el derecho a la huelga", y que De la Torre "se diera un baño de masas, contribuyendo a recrudecer las relaciones entre los trabajadores y la ciudadanía". Tampoco ha compartido la gestión del PP tras el paro, ya que "sólo han ganado los socios privados".
DE LA TORRE SEGUIRÁ NEGOCIANDO
También se ha visto en el pleno de este jueves una moción de Ciudadanos con la que pretendía despolitizar las relaciones laborales en Limasa. Sin embargo, la formación naranja se ha quedado sola, ya que los otros cuatro grupos han rechazado que ni el alcalde, que es, además, presidente del consejo de administración, ni ningún concejal puedan liderar esa negociación. Tampoco ha salido adelante su propuesta de que los ediles intervengan en procesos disciplinarios.
En su defensa de la moción, Cassá ha dicho a De la Torre que las condiciones exigidas por la plantilla "no vienen de Marte, sino que fueron firmadas por el regidor", añadiendo que "no es de recibo que, en una empresa en la que los privados tienen el 51 por ciento, sea el alcalde el que lidere la negociación colectiva".
"Ni tampoco los partidos están para sentarse en mesas en las que se discuten sanciones por bajo rendimiento, para eso están los consejos de administración", ha defendido el concejal de la formación naranja.
El resto de grupos de la oposición han coincidido en que "no podemos despolitizar Limasa porque en su gestión el equipo de gobierno es la principal guía", en palabras de la viceportavoz de Málaga para la Gente.
"La gestión de la limpieza es obligación del Ayuntamiento; es imposible que se desligue; el alcalde tiene que estar al frente para solucionar el problema, y los demás miembros de la Corporación debemos velar por el buen funcionamiento", ha afirmado Ramos, quien ha llegado a decir, incluso, en varias ocasiones que "es un empresa municipal".
De igual modo se ha pronunciado el viceportavoz de Málaga Ahora, quien ha resaltado que "los concejales electos, como consejeros de Limasa, tenemos que intervenir para defender los intereses de la ciudad y el dinero público".
Finalmente, el edil de Sostenibilidad Medioambiental, Raúl Jiménez, ha llamado la atención sobre el hecho de que el pasado 25 de febrero el Pleno aprobara por unanimidad instar al alcalde a que resolviera la situación de conflicto laboral en Limasa, de cara a evitar la huelga convocada para el 1 de marzo, y "ahora se le pida que no se siente más a negociar". "No podemos ir a salto de mata", ha concluido.