Forenses dicen que la acusada de degollar a una mujer tiene personalidad "explosiva"

Actualizado: martes, 2 junio 2015 15:34

MÁLAGA, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -

Los forenses han asegurado este martes que la mujer acusada de matar a otra, a la que supuestamente degolló con un cúter, no presenta ninguna perturbación o anomalía psíquica ni causa que merme su capacidad de comprender lo que hace, pero sí una personalidad "explosiva" ante los conflictos, señalando que la agresión sería un "acto impulsivo".

Un jurado juzga desde el pasado lunes a esta mujer para la que el fiscal pide 21 años y medio de prisión por un delito de asesinato, al sostener que el día de los hechos, la procesada y la víctima quedaron por la deuda de 4.000 euros que tenía la primera con la segunda por la venta de joyas y aprovechó que la mujer se había sentado en unas escaleras para sacar un cúter "con el que la degolló".

Los forenses han incidido en que tras las exploraciones realizadas a la procesada, ésta "no presenta enfermedad psiquiátrica" y no es una delincuente habitual, pero sí "por conflicto", pues tiene reacciones así derivadas de una situación psíquica anterior, que podría ser un mal periodo económico o estar sometida a fuerte presión.

En cuanto a la autopsia de la fallecida, los expertos han declarado que se le seccionó la traquea de izquierda a derecha, estando el agresor detrás de la víctima, por lo que no es lógico que el enfrentamiento se produjera de frente, como dijo la acusada en su declaración, porque entonces la mujer debería tener heridas de defensa que no presenta.

Los hechos sucedieron en diciembre de 2013 en La Cala del Moral, en Rincón de la Victoria (Málaga). Según las acusaciones, le seccionó la tráquea, la arteria carótida y la vena yugular, lo que le provocó una fuerte hemorragia y 'shock' hipovolémico que le ocasionó la muerte. Tras esto, la procesada le quitó las joyas que llevaba puestas y el bolso, apoderándose del móvil, y se fue del lugar.

La acusada admitió en su declaración ante los jurados que agredió a la víctima con un cúter, pero dijo, entre lágrimas, que no recuerda nada más que mover el objeto por delante donde estaba la mujer, sosteniendo que no tuvo la intención de matarla, ni siquiera quedó con ella ese día, sino que, al revés, "huía de ella, me tenía loca, me tenía amenazada".

Negó que quedara expresamente con la víctima ese día, al contrario, apuntó que "ella me buscó", explicando que se encontraron en otro lugar desde donde fueron andando a donde ocurrieron los hechos y que la mujer estaba "atacada, como fuera de control", y en un momento dado la cogió del cuello y le golpeó hasta romperle las gafas, incluso.

Además, según su relato, "ya le había pagado 3.500 euros de los 4.000 que le debía"; y en el momento del enfrentamiento la amenazó "con matar a mi hijo". Entonces, cogió el cúter que llevaba en el bolso habitualmente y lo movió por delante, pero no recuerda nada más, sólo que salió corriendo. Su defensa considera que se trata de un homicidio, por el que pide una pena de siete años de cárcel.