GRANADA 8 Jun. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del PSOE en el Parlamento de Andalucía, Manuel Gracia, afirmó hoy que la negativa del PP a apoyar el proceso de paz y las reformas estatutarias se debe a su acuerdo de "no aceptar" a medio y largo plazo cualquier "estrategia que afecte a la arquitectura del Estado" .
En rueda de prensa en Granada, antes de participar en un acto sobre la reforma del Estatuto de Autonomía de Andalucía en la facultad de Ciencias Políticas y Sociología, Gracia explicó así la "apuesta decidida" que en su opinión tiene el primer partido de la oposición respecto a la reforma del Estatuto Andaluz, al igual que lo tuvo con el Catalán, y también el proceso de paz con ETA.
Dicha estrategia "está ahora más clara que hace un mes", apuntó el portavoz del PSOE en el Parlamento, quien añadió que consiste en "negarse a acompañar o compartir con el PSOE y el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero cualquier reforma que afecte al Estado".
Es lo que "se está viendo ahora --continuó-- con la ruptura del acuerdo en el proceso de paz", lo que hace "impensable" por el momento, según el socialista, que vayan a modificar su postura de " cerrazón" y den un 'sí' a la reforma estatutaria en Andalucía, pese a lo cual, Gracia no cree que "todo esté perdido".
Además, el portavoz socialista indicó que la coincidencia en el tiempo de los debates sobre el proceso de paz y los estatutos "no debería directamente" distraer la atención de estos últimos puesto que se trata de cuestiones distintas.
El portavoz del PSOE en la cámara andaluz confió en que el texto presentado "no sufra modificaciones" del calibre del catalán, todo ello porque el que se ha presentado en Madrid procedente de Andalucía ha tenido como "precedente" al de Cataluña donde el Congreso ha establecido los límites.
Preguntado por el referéndum en Cataluña el próximo 18 de junio, Gracia afirmó "creo que no nos resistiremos a analizarlo" comparativamente con lo que pueda ocurrir en la comunidad autónoma andaluza, donde está previsto que se celebre en febrero de 2007, si bien consideró positivo que cuente con una participación que ronde el 50 por ciento.