SEVILLA, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Empleo de la Junta de Andalucía, Antonio Fernández, aseguró hoy que el 42,2 por ciento de los ciudadanos ve a la población inmigrante como "mano de obra necesaria"; mientras que el 72,2 por ciento reconoce su "relevancia" en su aportación al mercado laboral andaluz, en tanto que cubren puestos de trabajo para "los que no hay mano de obra suficiente o que quedan sin cubrir en la Comunidad".
Estos datos forman parte del segundo estudio 'Opiniones de la Población Andaluza ante la Inmigración' ('Opia'), elaborado por el Observatorio Permanente Andaluz de las Migraciones (OPAM), un instrumento de la Consejería de Empleo gestionado por el Instituto de Estudios Sociales Avanzados del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (IESA-CSIC).
En su intervención en las II Jornadas del Observatorio, Fernández afirmó que la mayor parte de los andaluces valora el hecho de la inmigración en la Comunidad de "manera positiva" y apuntó a un "alto grado de estabilidad" en la opinión pública regional, al presentar datos "muy similares" a los de la primera edición desarrollada en 2005. Así, detalló que el 42,6 por ciento de los andaluces valora positivamente la inmigración en la actualidad, frente a los 41,9 por ciento de la anterior encuesta.
El titular de empleo calificó la inmigración como un "vehículo prioritario" para el desarrollo económico y social de la Comunidad, además de como una "garantía de progreso para alcanzar la plena convergencia con Europa". Así, ratificó la apuesta de la Junta con "las personas de todos los territorios, evitando la exclusión social y con la continua mejora de las políticas en este sentido", para garantizar la integración de "aquellos que llegaron a Andalucía buscando un futuro mejor y que realizaron una importante aportación a la región económica y culturalmente".
El estudio refleja también la valoración del "enriquecimiento cultural" como uno de los efectos positivos asociados a la presencia de inmigrantes, que se ha incrementado del 13,9 por ciento en 2005 hasta el 17,8 por ciento en la presente edición.
Fernández destacó además el amplio respaldo a la plena participación social de los inmigrantes, ya que el 86,5 por ciento de los encuestados coinciden en que el colectivo debe tener acceso a la escuela y a la sanidad, y más del 70 por ciento apoya la reagrupación familiar, la obtención de la nacionalidad o el voto en las elecciones municipales.
La encuesta también recoge la actitud frente a la diversidad cultural, donde un 51,7 por ciento de los andaluces se muestra contrario a que los inmigrantes puedan vivir en Andalucía de acuerdo con sus costumbres; mientras que la mayoría se muestra de acuerdo con la idea de que realizan una aportación cultural positiva (61,3%).
Fernández matizó que en estos resultados influyen muchas variables sociales y demográficas, teniendo en cuenta que las personas con alto nivel de formación se sienten mucho más cercanas a los inmigrantes que las personas de escasa cualificación. En este contexto, Almería es una de las provincias con mayor proporción de menciones de "mano de obra necesaria" como efecto positivo deseable, mientras que Sevilla es la provincia donde el "enriquecimiento cultural" es reconocido en mayor proporción.
Por su parte, el estudio advierte de que el género parece conllevar perspectivas bien específicas, ya que entre los hombres prevalece una valoración general positiva del hecho migratorio, basada esencialmente en una apreciación de sus beneficios económicos y laborales, mientras que entre las mujeres predomina la "desconfianza y, por tanto, una valoración general negativa".