SEVILLA 21 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Asociación Andaluza Memoria Histórica y Justicia (AMHyJA) ha aseverado este martes que el decreto aprobado por el Consejo de Gobierno, que posibilita que las mujeres andaluzas que padecieron formas de represión sobre el honor, la intimidad y la propia imagen durante la Guerra Civil y los primeros años de la dictadura franquista reciban una indemnización de 1.800 euros, "llega un poco tarde", y ha considerado "más conveniente" que se lleven a cabo actos de homenaje en los distintos ayuntamientos de donde son originarias estas mujeres.
La vicepresidenta de AMHyJA, Francisca Maqueda, ha señalado a Europa Press que, a pesar de que se trata "de un reconocimiento que se debería haber hecho antes", desde su asociación se valora este decreto y el trabajo desarrollado a este respecto por el comisario de Memoria Histórica de la Consejería de Gobernación y Justicia, Juan Gallo, pues "es muy importante recuperar a un colectivo, el de estas mujeres, olvidado entre los olvidados".
En este sentido, Maqueda ha opinado que la Junta de Andalucía "va a poder dar poco dinero, pues muy pocas de estas mujeres siguen con vida", a lo que se suma, según ha dicho, "la dificultad de demostrar con documentos que se ha sufrido este tipo de represión", proponiendo en este punto un reconocimiento "más amplio y simbólico", de manera que en los plenos de los ayuntamientos andaluces en los que viven o vivían estas mujeres "se lean sus nombres en alto y se reconozca el papel que han jugado como transmisoras y donantes de memoria".
Al hilo de ello, la vicepresidenta de la Asociación Andaluza Memoria Histórica y Justicia ha considerado que "este reconocimiento público a estas mujeres sería mucho más efectivo que dar 1.800 euros y contribuiría a limpiar realmente su imagen", precisando que, en el caso de la capital hispalense, este acto-homenaje debería llevarse a cabo en 101 localidades.
EL DECRETO
Y es que el Consejo de Gobierno ha aprobado un decreto que posibilita que las mujeres andaluzas que padecieron formas de represión sobre el honor, la intimidad y la propia imagen durante la Guerra Civil y los primeros años de la dictadura franquista reciban una indemnización de 1.800 euros, como modo de reparación moral y reconocimiento a su papel en la construcción de la actual sociedad democrática.
La indemnización acordada, que se suma a las que desde 2001 viene concediendo el Gobierno andaluz a las víctimas de encarcelamientos y confinamientos en campos de concentración, hace referencia a hechos que no supusieron privación de libertad pero sí acciones vejatorias dirigidas especialmente contra la población femenina, como el rapado, la ingesta de aceite de ricino y la exposición al escarnio público.
El periodo considerado abarca los años de mayor incidencia de este tipo de represión, entre 1936 y 1950, según ha explicado el consejero de Gobernación y Justicia, Luis Pizarro, en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno, donde ha aclarado que en este momento no se tiene una estimación de las mujeres que podrían acceder a la indemnización.
En este sentido, ante la inexistencia de documentos que acrediten lo ocurrido en la mayoría de estos casos, las mujeres represaliadas podrán presentar cualquier prueba admitida en Derecho, incluidos testimonios de terceros y declaraciones juradas. Las pruebas serán revisadas por una comisión de estudio y valoración de la que formarán parte el comisario para la Recuperación de la Memoria Histórica, Juan Gallo, un miembro de su equipo y tres técnicos de la Administración autonómica.