Carmona dispone ya de nueva UVI móvil tras el caso de la anciana muerta mientras esperaba una ambulancia

CARMONA (SEVILLA), 2 (EUROPA PRESS)

El centro de salud de Carmona (Sevilla), goza ya de una nueva UVI móvil completamente habilitada y equipada gracias a la colaboración del Ayuntamiento, gobernado por Antonio Cano (PSOE), la Diputación provincial y el Servicio Andaluz de Salud (SAS), una medida implementada tras las movilizaciones sociales derivadas de la muerte de la anciana Rosario Alonso, fallecida el pasado 16 de agosto mientras esperaba una ambulancia.

Fuentes del Ayuntamiento informaron a Europa Press de que esta UVI móvil, financiada, habilitada y equipada gracias a la "colaboración" de estas tres instituciones, está ya "a disposición" del centro de salud de Carmona, desde donde funciona actualmente después de que el Consistorio adjudicase a 'Emergencia 2000 SA' el equipamiento de esta unidad móvil.

Cabe recordar que el Ayuntamiento, la Diputación y el SAS habían acordado la adquisición y equipamiento de esta UVI móvil para dar lugar a un nuevo equipo médico y sanitario "las 24 horas al día".

La medida obedece al compromiso adoptado por las administraciones tras el caso de Rosario Alonso, la anciana de 87 años fallecida el 16 de agosto en Carmona mientras esperaba una ambulancia. La muerte de esta anciana despertó una movilización social en el municipio hasta el punto de que casi 4.000 personas se manifestaron el 3 de septiembre reclamando la creación de una unidad móvil de urgencias (DCCU) en el pueblo.

LA DENUNCIA

En la denuncia formulada en su día por la familia de la anciana, recogida por Europa Press, se relata como a las 14,30 horas del pasado 16 de agosto, la hija de la difunta realizó una llamada a las emergencias pidiendo el traslado de una unidad móvil médica al domicilio de Rosario, en la calle Extramuros de Santiago del municipio, "ya que su madre estaba muriéndose, no reaccionaba de ninguna manera y casi no podía respirar".

Sobre las 15,05 horas, y al no haber llegado la ambulancia, una de las nietas de la fallecida, Raquel Rodríguez, llamó al teléfono para comunicar la misma incidencia, "a la que se manifiesta que en breve llegaría la ambulancia, solicitando nuevamente los datos de la enferma". "Nuevamente, a los diez minutos, y ante la desesperación de lo que estaba sucediendo, volvió a llamar al referido teléfono y preguntando el motivo de la tardanza, al cual no se dio explicación", reza la denuncia, que da cuenta de la repetición de esta operación en otra ocasión posterior.

Sobre las 16,00 horas la nieta de Rosario recibió llamada del número de emergencias, que cuestionaba por el estado de salud de la enferma, a lo que ésta respondió que ya había fallecido.