Archivo - Detalle de un autobús de Tussam circulando. Imagen de archivo. - Joaquin Corchero - Europa Press - Archivo
SEVILLA 24 Nov. (EUROPA PRESS) -
El comité de empresa de la sociedad municipal de transporte Tussam ha reclamado al Ayuntamiento de Sevilla y a la Gerencia de la compañía una mayor implicación en el mantenimiento de la calidad del servicio público, después de que se hayan incorporado nuevas líneas "con la misma flota", una decisión que califican de "vestir un santo para desvestir a otro".
En un comunicado, el comité ha exigido el compromiso de garantizar las aportaciones presupuestarias necesarias "no solo para mantener, sino para mejorar el servicio, porque la ciudad de Sevilla lo necesita". Asimismo, ha subrayado que las demandas de movilidad son cada vez mayores y reclama un proyecto de Tussam "a corto, medio y largo plazo", ya que, según asegura, la plantilla percibe actualmente "dejadez y falta de ideas sobre el papel de Tussam y el futuro del transporte urbano en Sevilla".
En esta línea, el comité ha recordado que ha advertido en varias ocasiones del "deterioro patente y notorio" del servicio. Asimismo, ha hecho hincapié en que la "falta" de inversiones es "evidente", tanto para la renovación de la flota como para ampliar la oferta y dar respuesta a las demandas de la ciudad. Ante ello, ha añadido que, desde hace tiempo, viene alertando de que la empresa "tiene las costuras abiertas" y trabaja "al límite de sus posibilidades y recursos".
El comité ha advertido de que, si no se adoptan medidas "urgentes" y decisiones organizativas y presupuestarias, además de mejoras en los sistemas de comunicación y explotación, Tussam podría alcanzar "una situación de no retorno", quedando "incapaz de asumir los retos de futuro" y relegada a "un papel residual" en la movilidad de Sevilla.
"UN PROBLEMA DE SATURACIÓN"
De igual forma, ha criticado que crear nuevas líneas sin dotarlas de recursos económicos, personal y nuevos vehículos "profundiza en un problema de saturación denunciado desde hace tiempo" y evidencia una "falta de apoyo y prioridad al servicio público".
El comité ha añadido que el traslado temporal de los partidos del Real Betis Balompié al Estadio de La Cartuja, debido a las obras de renovación del Benito Villamarín, está incrementando la afluencia en la zona y "agravando el problema", lo que, a su juicio, evidencia "la falta de apuesta de la Corporación municipal por el servicio público de Tussam".
Asimismo, ha señalado que esta "carencia" se refleja también en la línea 2, que "precisa una conversión en línea exprés, con reubicación de paradas y un nuevo sistema de explotación". Ante ello, asegura que, "por volumen de pasajeros, en cualquier otra ciudad estaría configurada como una línea Bus de Tránsito Rápido (BTR), mientras que miles de usuarios sufren a diario un modelo obsoleto, llegando incluso a operar con vehículos de doce metros por la falta de autobuses articulados". Una situación que, advierte, afecta igualmente a las líneas 1, 3 y LN.
El comité ha insistido en que no es la primera vez que Sevilla afronta obras de gran envergadura que afectan a toda la red, alterando tiempos de recorrido, frecuencias y la calidad del servicio, al tiempo que ha subrayado que estos problemas "perjudican la confianza de los usuarios en un servicio que la ciudad ha ido recuperando tras la pandemia".
Asimismo, ha subrayado que la calidad del servicio "puede deteriorarse en muy poco tiempo si las obras y sus desvíos no se planifican adecuadamente, si los horarios no se adaptan con rapidez a la situación real o si no se detectan a tiempo las líneas que requieren ajustes específicos según la temporada".
Además, ha adviertido de que, cuando se actúa desde la "improvisación y no se adoptan medidas correctoras con antelación", se termina "paseando autobuses vacíos por Sevilla", lo que genera "desconfianza" entre los usuarios ante "un servicio poco fiable", así como "malestar entre el personal de la Dirección de Operaciones por no disponer de herramientas adecuadas para realizar su trabajo".
Por último, el comité ha manifestado que esta situación provoca "frustración y desapego" en la plantilla y "conflictos entre usuarios y trabajadores por una situación de la que ninguno es responsable".