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SEVILLA, 6 Nov. (EUROPA PRESS) -
Dos hermanos de la matriarca del clan de los 'Perla' han declarado este miércoles que ésta no participó ni estuvo presente en el tiroteo ocurrido el pasado día 20 de agosto en el Polígono Sur en el que falleció una niña de siete años de edad, según han informado a Europa Press fuentes del caso.
En este sentido, las mismas fuentes consultadas han informado de que, en la jornada de este miércoles, han declarado por videoconferencia ante la juez de Instrucción número 20 de Sevilla, que investiga los hechos, cuatro hermanos de la 'Perla' que se encuentran en la cárcel de Huelva y un yerno de la matriarca internado en la cárcel de Albolote (Granada).
Pues bien, dos de los hermanos de la matriarca han reconocido que, el 20 de agosto, se dirigieron hacia el bloque de viviendas junto al que finalmente ocurrió el tiroteo con el objetivo de localizar a una persona, llamada 'Faíto', que presuntamente había secuestrado a un hijo de Antonio 'el coleta'.
Ambos han asegurado que la 'Perla' no participó en el tiroteo --por el que hay imputadas 13 personas, 10 de ellas en prisión-- y que no utilizaron armas de ningún tipo, sino que las armas las llevaban Antonio 'el coleta' y su hijo, llegando a admitir uno de ellos que únicamente llegó a sacar un bastón con el objetivo de "mediar".
Esta declaraciones se han producido después de que, el pasado día 10 de octubre, dos testigos protegidos comparecieran ante la juez y ratificaran sus declaraciones previas.
Uno de ellos, en contra de lo manifestado por dos de los imputados que han declarado este miércoles, ratificó que el día de los hechos pudo ver a la matriarca del clan de los 'Perla' portando un arma pequeña que podría ser una "metralleta" con la que efectuaba "numerosos disparos" mientras gritaba 'Matad al Faíto'.
LOS TESTIGOS PROTEGIDOS
De su lado, el segundo de los testigos protegidos llamó ese mismo día al servicio de Emergencias 112, una vez ocurrido el tiroteo, advirtiendo de que había visto cómo varios miembros del referido clan iban armados y avisando de que parecía que iba a producirse "una batalla campal".
Si bien ambos testigos ratificaron plenamente ante el Juzgado de Instrucción número 20 los testimonios ya descritos, el primero de ellos habría admitido que pese a contemplar los hechos no dio cuenta de tal extremo a las autoridades y que cuando acudió a relatar lo visto al Grupo de Homicidios lo hizo en compañía, precisamente, del padre de la víctima mortal de los hechos.
Hay que recordar que, tras ser detenidos en Mijas (Málaga), la juez envió a prisión a nueve de los diez detenidos inicialmente, pertenecientes al clan de los Perla, por los presuntos delitos de homicidio, contra la salud pública, tenencia ilícita de armas, encubrimiento y amenazas.
A estos detenidos, que abandonaron el Polígono Sur tras el suceso para refugiarse primero en Hinojos (Huelva) y luego en una urbanización de Calahonda, en el término municipal de Mijas, se les incautaron varias armas, además de más de un kilo de una sustancia que aparentaba ser cocaína, entre 150.000 y 300.000 euros en efectivo y ocho kilos de oro.