SEVILLA 1 Feb. (EUROPA PRESS) -
Ecologistas en Acción demandó hoy, en el Día Mundial de los humedales, un mayor esfuerzo a la Junta de Andalucía para que garantice la conservación y productividad de éstos, ya que, según dijo, el 60 por ciento de ellos han desaparecido "como consecuencia de actuaciones de desecación y urbanización".
En un comunicado remitido a Europa Press, la organización en defensa del medio ambiente explicó que los humedales son superficies con presencia de agua, bien en superficie o a pocos centímetros, que mantienen una vegetación adaptada a las condiciones de humedad y una rica y diversa avifauna, considerando "múltiples" sus beneficios para el conjunto de la sociedad.
La citada fuente precisó que los humedales costeros tienen una "gran importancia ecológica y económica por su elevada productividad y diversidad biológica, puesto que son lugares donde periódicamente se concentran numerosas especies marinas para desovar o criar".
Asimismo, de los humedales se obtienen materias primas para productos comercializables, especialmente en el sector tradicional y artesanal, constituyen una reserva de agua para la agricultura y ganadería, reúnen unas condiciones y características adecuadas para desarrollar actividades lúdicas y de interpretación ambiental, siendo además "los mayores reservorios de biodiversidad en el sentido más amplio del término".
"A pesar del incuestionable valor ecológico y productivo de las zonas húmedas, el ritmo de destrucción y alteración se mantiene a niveles injustificables", comentó la organización.
"FRENAR NIVELES DE OCUPACIÓN"
Por estos motivos, Ecologistas en Acción consideró "fundamental" frenar los niveles de ocupación y cambio de uso, "casi siempre relacionado con el crecimiento urbanístico, de superficies aledañas a zonas húmedas e incluso de éstas mismas, como está ocurriendo actualmente en Huelva tanto en Isla Cristina como en el entorno de la marismas del Odiel".
En este sentido, incidió en que "se debe realizar un mayor esfuerzo desde la Administración pública para reducir la contaminación del sustrato y de las aguas subterráneas y superficiales, ya que los contaminantes producen desequilibrios y una alteración grave del funcionamiento de la dinámica de los humedales.
Al hilo de ello, criticó la reciente decisión de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir de aportar recursos extras a la agricultura de la zona procedentes del pantano de Aznalcóllar, ya que, a su juicio, "refleja la incapacidad de la administración para controlar la expansión del regadío ilegal".
Además, Ecologistas en Acción resaltó que también constituyen una nueva amenaza al estuario del Guadalquivir "los centenares de kilogramos de metales pesados que la Junta de Andalucía ha autorizado verter al río a la minera Cobre Las Cruces, así como determinadas obras de infraestructuras como carreteras, embalses, canales de riego de cemento, suponen, directa o indirectamente, la alteración o destrucción de humedales".
Por último, achacó también la desaparición de los humedales a la introducción de especies foráneas en el medio natural, "lo que para numerosos expertos en conservación, supone la segunda causa más importante de extinción de especies".