SEVILLA 1 Dic. (EUROPA PRESS) -
Los trabajadores de la plantilla de Metro de Sevilla han secundado hoy en la primera asamblea --realizada para los trabajadores del turno de tarde y a la que han asistido cerca de un 90 por ciento de éstos-- por unanimidad el comienzo de medidas de presión contra el intrusismo laboral, el incumplimiento de promesas verbales en cuanto a los sueldos o los turnos de 12 horas que marcan los servicios especiales de Semana Santa y la Feria de Abril.
El presidente del comité de empresa, Ángel Manuel Florindo, indicó a Europa Press que la plantilla "ha dado la talla, puesto que se han presentado hasta compañeros que están de vacaciones" y que, en este sentido y a falta de una segunda asamblea para los empleados de los turns de mañana y de noche, "ya contamos con un respaldo para comenzar las protestas".
Florindo, en este sentido, lamentó que la asamblea, "tal y como temíamos", haya tenido que celebrarse en la calle ante la negativa de la empresa a ceder sus instalaciones al hacer menos de dos meses de la última asamblea.
Los trabajadores esperarán a las primeras reuniones de la mesa de negociación del convenio --hasta mediados de enero, aproximadamente-- para ver la actitud de la directiva. "Confiamos en el diálogo pero si vemos que persisten comenzaremos estas medidas cuando lo consideremos oportuno", subrayó el presidente del comité de empresa de Metro de Sevilla, que insistió en lo "progresivo" de dichas acciones, toda vez que los trabajadores "tienen muy presente en todo momento que no se debe perjudicar a los viajeros".
De esta manera, Florindo expuso que los primeros pasos no perjudicarán a los usuarios, si bien, de persistir lo que consideran una actitud "negativa" de la empresa, se escalaría en la intensidad de las protestas, "porque hay empleados que ya están bastante 'quemados' y a ninguno le temblaría el pulso".
Los trabajadores ya tienen toda una serie de reivindicaciones como los desencuentros en materia retributiva, pues durante las entrevistas de trabajo, los empleados recibieron la "promesa verbal" de gozar de un incremento salarial del diez por ciento tras los seis primeros meses de funcionamiento del metro y, a día de hoy, "esto se ha quedado en un plus de productividad trimestral de hasta el 2,5 por ciento".
Igualmente, la plantilla se opone a la "obligación" de prestar servicios a turno partido debido a la ampliación del horario de cierre los viernes, sábados y vísperas de festivos, extremo "no contemplado para la plantilla contratada actualmente". Lamenta además el comité de empresa el "intrusismo laboral" sufrido por parte de la empresa de seguridad subcontratada por Metro de Sevilla, porque sus empleados realizan funciones del personal de las estaciones, al ejercer como supervisores comerciales e interventores.
DESACUERDOS SILENCIADOS
Criticó también Florindo que tras tres reuniones con los representantes de la empresa, los dirigentes "se niegue a firmar las actas" a menos que sólo contemplen "acuerdos", entendiendo que la empresa quiere silenciar los desacuerdos y protestas en el plano oficial. Esta práctica, de hecho, la vinculó con los "consejos" supuestamente dados a algunos dirigentes para que no asistan a los encuentros convocados por el comité de empresa, que se ha visto obligado a celebrar algún encuentro "en un local" propiedad de uno de sus miembros porque los responsables de la empresa convocados a estas reuniones tienen miedo a "represalias".
Se opone el comité de empresa, también, a los turnos de 12 horas supuestamente impuestos desde la directiva para los servicios especiales de las fiestas de primavera, porque tras la experiencia de 2009, la empresa habría anunciado la repetición de esta práctica para la Semana Santa y la Feria de Abril de 2010.
Además, desde la apertura del metro el 2 de abril de 2009, algunas de las estaciones no gozan aún de agua potable y "exceptuando la de Ciudad Expo, las demás no disponen de ningún surtidor de agua que no sea el lavabo o la pileta de limpieza, de donde este verano el agua que suministraba rondaba los 35 o 40 grados".