Acusa al Gobierno de ser el que "más ha despreciado a las víctimas" del terrorismo y exige disculpas a De la Vega
MADRID, 3 Feb. (EUROPA PRESS) -
Teresa Jiménez Becerril, hermana del concejal sevillano del PP asesinado por ETA Alberto Jiménez Becerril, mostró hoy su indignación con el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, al tener que "explicarle a mis sobrinos el hecho de que vea razonable que De Juana Chaos se vaya a casa para que no se convierta en el mártir". "Mártires, señor Chaves, son los padres de esos niños, y usted, como español, no debería olvidarlo", afirmó con indignación.
Durante su intervención en los discursos finales de la manifestación, una de las más aplaudidas, Jiménez-Becerril también acusó al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero de ser el que "más ha despreciado a las víctimas" del terrorismo y exigió disculpas a la vicepresidenta del Gobierno, Maria Teresa Fernández de la Vega, para su madre, "cuyo hijo fue asesinado" por la banda, y retire sus palabras en las que pedía que acudieran a la manifestación "personas de buena fe".
Además, aseguró que con ETA no hay posibilidad de diálogo. "No importa lo que le demos a ellos, siempre querrán más, para poder seguir amenazándonos y gritándonos", sentenció. A su vez, consideró que el llamado proceso de paz es "una estrategia" para que la banda y su entorno pueda continuar con su actividad delictiva. "Los asesinos y cómplices han aprendido que la palabra paz es un salvoconducto que les permite seguir asesinando", subrayó Jiménez Becerril.
Otro de los ejes centrales de su intervención fue hacer ver al Gobierno de lo erróneo de plantear una solución dialogada para el final de la lucha armada de la banda. "ETA habla y mata, ETA escribe y mata, ETA se manifiesta y mata, ETA negocia y mata, haga lo que haga ETA nunca deja de matar", dijo.
También lanzó una serie de preguntas al Gobierno para que comprendiera el verdadero propósito de la manifestación. "¿Cómo hemos podido llegar a esto si lo único que queremos es que los asesinos etarras cumplan sus condenas y que la banda terrorista no haga política mientras sigue matando?", se cuestionó en alusión a la política antiterrorista del Ejecutivo y a su gestión del proceso de paz tras el atentado de Barajas.
"A MÍ LA CRISPACIÓN ME LA HIZO ETA"
Teresa Jiménez Becerril censuró también a los que "atacan a la víctimas", que son "personas libres que no quieren ceder a la banda terrorista", y defendió que no existe petición "mas honesta" que ésa. Denunció a las voces que tachan como "crispación" manifestaciones como ésta respondiéndoles de la siguiente forma: "A mí, la verdadera crispación me la hizo ETA cuando asesinó a mi hermano y a su mujer, que dejó a dos niños sin padres el 30 de enero de hace nueve años".
Afirmó que los que le es indiferente las declaraciones de quienes la tachan de "crispadora" y lamentó que estas mismas personas sean quienes "le dan la espalda y se echan en brazos de Otegui, que de paz, seguramente sabe mucho más que yo".
Especialmente crítica se mostró con la posibilidad de prisión atenuada para el etarra De Juana Chaos, preguntando al Ejecutivo de "si quien asesina a 25 personas y dice que disfruta viendo nuestra cara de dolor en los funerales debe ser liberado" para no convertirle en un mártir.
De hecho, Jiménez Becerril se refirió a una concentración en Barcelona, donde se pedía la libertad para de Juana Chaos donde se aludía a que las mujeres tenía que "tirar del carro del proceso de paz". "Yo soy mujer y nunca voy a tirar de un carro que carga con casi mil muertos, entre los que se encuentran mi hermano y su mujer", aseveró Becerril, entre el aplauso masivo de los congregados en la Puerta de Alcalá
