SEVILLA, 13 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Sevilla ofrecerán esta semana a las familias de etnia gitana exiliadas del Polígono Sur de Sevilla por temor a represalias tras la muerte de un menor en un tiroteo hace unos meses un dispositivo para acoger durante el día a los menores que viven con ellos y ofrecerles actividades de ocio, aseo y manutención.
Según informó a Europa Press el delegado de la Consejería para la Igualdad y el Bienestar Social en Sevilla, Manuel Antonio Gálvez, la Junta y el Ayuntamiento de Sevilla negociarán durante esta semana con dichas familias la posibilidad de trasladar a los niños a un dispositivo --en el que participarán las Consejerías de Educación, Salud e Igualdad y Bienestar Social-- en el que puedan ser atendidos desde las 10,00 horas de la mañana hasta las 20,00 horas de la tarde, cuando volverían con sus familias.
Se trataría, precisó el delegado, de acondicionar un área con arboleda de un colegio público de Sevilla por concretar y reservar una zona de piscina en una franja horaria para la atención y disfrute de estos menores durante las horas de calor. Asimismo, un grupo de educadores ofrecerían a los niños aseo, desayuno, almuerzo, merienda y cena, después de lo cual serían devueltos con sus familias hasta el día siguiente, ya que los padres "no acceden a estar sin sus hijos".
Este dispositivo estaría en funcionamiento desde esta misma semana hasta el inicio del próximo curso escolar el 10 de septiembre siempre y cuando, insistió Gálvez, se cuente con el consentimiento de las familias.
Así, recordó que este ofrecimiento llega después de que dichas familias hayan rechazado en un par de ocasiones la posibilidad de trasladar a los menores y las madres menores de los mismos en un centro de la red de protección de la Junta de Andalucía para atender sus necesidades sin que ello supusiera la adopción de "ningún tipo de medida cautelar" que pudiera significar la retirada de la tutela de los menores a sus familias.
Por el momento, las familias exiliadas, tras el intento de volver a sus casas en el Polígono Sur en la madrugada del sábado, desde donde supuestamente tuvieron que huir de nuevo al ser recibidas a tiros; se encuentran dispersas entre las inmediaciones del Estadio Olímpico y el barrio de los Bermejales, donde algunas han sido acogidas por sus familias.
