El pleno de Alcalá de Guadaíra rechaza reprobar al edil Mora y la alcaldesa pide "reconducir la situación con empatía"

Jiménez señala "opiniones muy diversas" sobre lo sucedido y tiende "la mano" pidiendo disculpas por una confusión en la anterior sesión

ALCALÁ DE GUADAÍRA (SEVILLA), 4 (EUROPA PRESS)

El último pleno ordinario celebrado por el Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra (Sevilla), gobernado por la socialista Ana Isabel Jiménez junto a Andalucía por Sí (AxSí), incluyó el rechazo de una moción del concejal no adscrito escindido del grupo municipal de Alcalá Nos Importa, Manuel Araujo, en demanda de la reprobación del primer teniente de alcalde, el socialista Jesús Mora, asunto que ocupó además otros puntos del orden del día de la sesión, con la negativa de los socialistas sobre las actuaciones atribuidas a dicho edil de su grupo.

En concreto, en el pasado pleno ordinario de mayo, el edil no adscrito Manuel Araujo reclamaba en su propuesta "reprobar el comportamiento" supuestamente protagonizado por el socialista Jesús Mora, asegurando que durante la celebración de una comisión informativa municipal el pasado 16 de abril, el mismo le habría conminado a salir al patio del Ayuntamiento de una manera que habría proyectado "connotaciones" de supuesta agresividad; lo que le llevaba a avisar de que a su juicio, dicho capitular del Gobierno local incurriría supuestamente "a menudo en la prepotencia y el ninguneo".

La portavoz del Gobierno municipal, la socialista Ángeles Ballesteros, manifestaba de su lado que "hay momentos en el calor del debate, en el contexto en el que ambas partes no actuaron todo lo correctamente que se debería, en los que puede darse una situación susceptible de mejorar"; si bien aseguraba que ella estuvo presente en la sesión de aquella comisión municipal y "no hubo ninguna actitud agresiva" por parte del edil Jesús Mora.

En ese sentido, la edil socialista invocaba el principio de "respeto" y puntualizaba que "las disculpas son por ambas partes por una situación que se produce" con la participación de ambos ediles; tras lo cual Manuel Araujo manifestaba que en efecto, la situación se "fue de las manos" por parte de ambos, mostrando sus "disculpas" por haber respondido una supuesta "burla" del edil socialista con un agrio comentario sarcástico contra dicho concejal.

MOCIÓN RECHAZADA

No obstante, el concejal no adscrito insistía en que el edil socialista le "invitó a salir" de la sala con "con un tono más agresivo o menos agresivo", pidiendo también de su lado "respeto" y remarcando su gesto de pedir "perdón" a Mora, como modo de solicitar que este actuase del mismo modo; toda vez que la moción fue rechazada con el voto en a favor de toda la oposición y el voto en contra del PSOE y de Andalucía por Sí, que suman mayoría.

Tras ello, el pleno abordó una petición del grupo municipal de Alcalá nos Importa en demanda de una comparecencia expresa de la alcaldesa en la próxima sesión plenaria, para que se pronunciase personalmente sobre este mismo asunto; extremo rechazado con el mismo resultado en la votación y el aviso de la primer edil de que la solicitud no cumplía la regulación prevista para estas comparecencias, al estar ceñidas las mismas "a las actuaciones de la gestión del Gobierno" local y aludir esta petición a la búsqueda de una "opinión" sobre un aspecto ajeno a la acción de gobierno como tal.

Finalmente, el pleno trató una pregunta también de Alcalá nos Importa, en demanda de conocer la "opinión" de la alcaldesa y si estaba prevista la adopción de "alguna medida" ante situaciones que a juicio de dicho grupo municipal podrían ser calificadas de "violentas".

"OPINIONES MUY DIVERSAS" DE LO SUCEDIDO

Ante ello, la alcaldesa manifestaba que había "escuchado opiniones muy diversas" sobre lo sucedido en la mencionada comisión municipal, destacando la "necesidad de que todos los miembros de la corporación" local alcalareña analicen la situación, bajo la premisa de que su papel en la vida municipal debe estar orientado a "intentar aportar todo lo posible, cada uno desde la posición que tiene", en el "objetivo común" de mejorar la vida de la ciudadanía alcalareña.

La alcaldesa señalaba que el papel de los ediles no es "entrar en conflictos que no aportan nada a la sociedad, sino todo lo contrario", pues el deber de los representantes municipales es "tender puentes" entre ellos mismos, en pro de la ciudadanía local.

Por eso, invitaba a los ediles de todos los grupos municipales a "una reflexión conjunta, para intentar reconducir la situación hacia un espacio de respeto en los debates, propuestas, acuerdos y desacuerdos, desde el respeto absoluto entre compañeros de corporación, como personas independientemente" del partido al que pertenezca cada cual.

LA ALCALDESA ABOGA POR LA "EMPATÍA" Y PIDE PERDÓN POR UNA CONFUSIÓN

Llamaba así a un "entendimiento desde la empatía", a un "esfuerzo colectivo para eliminar esos conflictos que no suman, que restan en lo colectivo y lo personal; evitando cualquier descalificación o subida de tono".

En ese sentido, Jiménez defendía que había decidido ser la "primera en tender la mano", pidiendo públicamente "disculpas" en el pleno por haber reprochado en la anterior sesión a la edil de Vox Carmen Loscertales una grave acusación que no habría sido tal y que ella entendió "mal en un momento acalorado del final del pleno. "Intentemos reconducir todos la situación. Hablando se entiende la gente", remarcaba la alcaldesa.