SEVILLA, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Pleno ordinario del Ayuntamiento de Sevilla aprobó hoy por unanimidad, en el marco de una propuesta presentada por el Grupo de IU y tras una enmienda introducida por el Grupo Popular y aceptada, instar al Parlamento andaluz a tener en cuenta las circunstancias específicas del comercio ambulante para plantear condicionantes concretos dentro de la transposición de la nueva directiva de servicios Bolkestein, que restringe en el ámbito temporal el plazo de las licencias y deja el tiempo de vigor en un periodo de uno a cuatro años.
El portavoz municipal de IU, Antonio Rodrigo Torrijos, incidió en que la aplicación de esta normativa supondría "una transposición de la precariedad que ya se abre camino en la actividad de estos profesionales". Los comerciantes, relató, consideran la norma "un ataque frontal", razón por la que la federación de izquierdas presentó una propuesta que buscaba, en primer lugar, mostrar el apoyo a las reivindicaciones de los profesionales de la venta ambulante, "que podrían ver alteradas las rutas de venta que han consolidado tras años de ejercicio en su profesión".
Quedando aprobado este primer punto con la abstención del PSOE, el concejal del PP Vicente Flores presentó una enmienda al segundo punto --que pretendía solicitar a la Cámara andaluza la exclusión del comercio ambulante del ámbito de aplicación de la directiva para garantizar la continuidad de los comerciantes que ya ejercen--, ya que, estando los populares de acuerdo con la filosofía de la propuesta y considerando necesario un mayor esfuerzo regulador, ven "imposible" que el sector pueda quedar fuera del proceso.
Los socialistas también se abstuvieron en la aprobación del apoyo de diferentes concentraciones de los comerciantes. Por último, un cuarto punto, respaldado por unanimidad, fue introducido por enmienda del PSOE presentada por la concejal de Medio Ambiente, Encarnación Martínez, instándose a abrir un periodo de negociación entre comerciantes y Dirección General de Comercio de la Junta de Andalucía.
Por parte de los profesionales, el presidente de la Asociación de Vendedores Ambulantes de Sevilla (AVAM), Miguel Bejarano, ya explicó a Europa Press que, a día de hoy, "todo" el sector está disconforme con las connotaciones de esta medida, ya que en la práctica supondría que "profesionales de este ámbito que han ejercido su labor durante 20 o 30 años se verían de la noche a la mañana sin la seguridad de que podrán seguir siendo los titulares a medio plazo", ya que la antigüedad no se tiene como un criterio determinante.
"No hay seguridad ni continuidad", lamentó Bejarano, que criticó el hecho de que la ley se haya aprobado sin consultar con los colectivos más perjudicados por ella, lo que 'tiene a todos los órganos implicados con la norma disconformes'.
Ya a nivel andaluz, las principales asociaciones de comerciantes ambulantes, integradas en la Confederación de Empresas pequeñas y autónomos (Cempe) en la región, anunciaron a finales de enero una gran concentración el 25 de febrero ante las puertas del Parlamento de Andalucía en contra de la transposición de la directiva.
