Las cuentas son rechazadas por IU y PP, que las califica como las de "la cobardía y el atrincheramiento"
SEVILLA, 27 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Pleno ordinario de la Diputación de Sevilla aprobó hoy los presupuestos de la corporación y de sus organismos autónomos y sociedades correspondientes al próximo ejercicio 2009, que bajo la premisa de priorizar el gasto social --188,35 millones de euros para políticas sociales, un 47,4 por ciento del total-- y el mantenimiento de la inversión municipal con una política de "austeridad", supondrán un presupuesto consolidado de 397.031.763,93 euros.
El proyecto presupuestario fue presentado por el diputado de Hacienda y Patrimonio, el socialista Manuel Domínguez, que recalcó la subida del 4,87 por ciento que este presupuesto supone con respecto al del presente año 2008, que se elevaba a 378.592.861,02 euros. Estas cantidades se enmarcan dentro del presupuesto general bruto, que en 2009 ascenderá a 430.310.968,52 euros, ascendiendo el presupuesto de la Diputación a 360.562.950,20 euros, un 84 por ciento del total consolidado.
Con una previsión de ingresos que el gobierno califica de "realista y prudente", y con novedades dentro de la organización del ente como la desaparición del Área Institucional o la fusión de Sevilla Activa y Gestión Inmobiliaria Provincia S.A. (Gipsa), Domínguez señaló que los ingresos por operaciones no financieras representan el 87,25 por ciento del presupuesto consolidado, subiendo un 3,98 por ciento respecto del 2008. Los ingresos por operaciones financieras, por otro lado, suben un 11,37 por ciento en el presupuesto consolidado para 2009, alcanzándose los 50,6 millones de euros.
En lo tocante a gastos, el concepto de gastos no financieros experimenta un crecimiento del 5,18 por ciento, alcanzando más de 362,3 millones de euros, frente a los 344,5 millones de euros de 2008. En los gastos se presupuesta por primera vez el Plan de Impulso Municipal, diez millones correspondientes a la anualidad del próximo ejercicio. Asimismo, y ya en aspectos concretos, el gasto de personal se sitúa en torno al Índice de Precio al Consumo (IPC), un 4,4 por ciento, mientras que el gasto financiero crece un 1,76 por ciento para hacer frente a los gastos derivados de la amortización de la deuda viva.
El diputado de Hacienda y Patrimonio indicó, con respecto a la pretensión de austeridad, que las medidas recogidas en el presupuesto --congelación de retribuciones del personal político y eventual de confianza, dietas o partidas asignadas a grupos políticos-- supondrán un ahorro de 4,3 millones de euros. Por otro lado, Domínguez, en lo referente a la política social, dio cuenta de partidas para aplicación de la Ley de Dependencia (60,8 millones), Ayuda a Domicilio (7,2 millones) o situaciones de emergencia social (180.000 euros).
En el capítulo de transferencias corrientes, este capítulo subirá en 14 millones de euros, con un aumento del 49 por ciento respecto a lo que los ayuntamientos recibieron en 20o08, con un total de 42,3 millones para este objetivo. Por último, los presupuestos recogen una inversión de 121,5 millones de euros en infraestructuras públicas para la reactivación económica.
El portavoz del Grupo Andalucista, Tomás Alfaro, intervino en su alocución asegurando que estos presupuestos "no son para salir de la crisis", aunque "sí lo hubieran sido" con el cumplimiento de las partidas del Acuerdo Local de Concertación, mediante el cual se aportarían 700 millones hasta 2011. Recordando la presentación de ocho enmiendas a los presupuestos por parte del PA, Alfaro apoyó la inclusión del Plan de Impulso Municipal, mientras que, posteriormente, instó al organismo a convocar la oferta de empleo público para casi 300 plazas que no están cubiertas y que son necesarias en el contexto socioeconómico que sufre la provincia.
Por su parte, el portavoz del Grupo de IU, Manuel Gutiérrez Arregui, apuntó que los presupuestos de 2007 se cerraron con 113 millones de remanente, "y está previsto que en 2008 suceda algo parecido". Concretó que la federación también ha presentado ocho enmiendas al proyecto presupuestario y señaló que, caso de que no se incluyan partidas "concretas y extraordinarias" para la concertación social, la federación considerará el acuerdo una "tomadura de pelo". Asimismo, alertó sobre el recorte de transferencias concretas a empresas, de 41 a 33,2 millones, y de la "privatización encubierta" en la Diputación al darse trabajo a empresas externas por valor de 20,5 millones.
La postura del Grupo Popular fue expuesta por su portavoz, Juan Bueno, que incidió en que los presupuestos deben invertir la tendencia de "desilusión e incertidumbre" causada por la crisis, si bien criticó que el programa presupuestario de 2009 no aplica la austeridad ni contribuirá a la reactivación económica. Justificó su aserto al señalar que el gasto corriente, "por el que se mide la austeridad", sube un 7,36 por ciento, mientras que el gasto de capital, "el que hay que aumentar en tiempos de crisis", sólo ha subido un 1,1 por ciento; a ello se añade que el ente supramunicipal, a su juicio, tendrá dificultades para llegar al 40 por ciento de ejecución.
"Son los presupuestos de la cobardía y el atrincheramiento", según indicó Bueno, que calificó los presupuestos de "hechos desde el agotamiento", lamentando la situación "insostenible e intolerable" de la administración. En este sentido, el portavoz del PP señaló que áreas tan "imprescindibles" para la reactivación económica como Juventud y Deportes, Sostenibilidad y Ciclo Hidráulico o Turismo e Innovación sufren recortes, mientras que los planes de inversión en los pueblos baja un 10 por ciento.
Posteriormente, el diputado de Hacienda respondió a la presentación de las 16 enmiendas de IU y PA, mientras que tanto él como el portavoz del Grupo Socialista, Francisco Díaz Morillo, acusaron al Grupo Popular de "trabajar poco" los presupuestos. De hecho, el presidente, Fernando Rodríguez Villalobos, aprovechó su intervención final para acusar a Bueno de "catastrofismo enfermizo".
Así, el PSOE abogó por "conocer la propuesta del PP, para ver dónde proponen reducir gastos", agregando que "lo de los presupuestos cobardes debe decírselo a los que nos votan cada cuatro años". El PP, posteriormente, aseguró que si no presenta una alternativa es porque "no sabemos cuáles son", al ser unos "presupuestos fantasma".
CCOO RECHAZA LOS PRESUPUESTOS
Otro colectivo que rechaza los presupuestos del organismo supramunicipal es la sección sindical de CCOO en la Diputación. A este respecto, la secretaria general del sindicato en el ente, Isabel Vidal, afirmó en un comunicado que las cantidades contempladas para plazas vacantes no cubiertas, "o sea, recursos cuantificados pero no utilizados", es de nueve millones de euros, siendo, a juicio del sindicato, el presupuesto "real" de personal de la plantilla de la Diputación del 17 por ciento del total del montante destinado sólo al organismo, lo que asciende a 61.469.310 euros.
Vidal, en este sentido, subrayó que la "nula" participación de los agentes sociales tiene "efectos negativos" sobre su ejecución, siendo las partidas "insuficientes" para poder garantizar el desarrollo de la carrera profesional y la realización de una oferta pública de empleo, así como que "no están adecuadamente gestionadas".
Por ello, CCOO denunció públicamente la "falta de cumplimiento" de los acuerdos "que origina un mal clima laboral, la desmotivación del personal y la precariedad de los derechos laborales". "La política de personal en la Diputación gira en torno a intereses e intercambios de favores que nada tienen que ver con los derechos generales de la plantilla ni con los destinatarios de nuestros servicios", sentenció el sindicato.
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