Actualizado: jueves, 12 junio 2014 20:30

SEVILLA, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -

Trabajadores de las consejerías de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, ubicada en la calle Tabladilla; y de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, enclavada en la calle Manuel Siurot, han celebrado este jueves a las puertas de la primera de las instalaciones una concentración para pedir al Ayuntamiento de Sevilla la revisión de la implantación de la zona azul en las áreas de influencia de ambos centros de trabajo.

Miguel Ángel Rodríguez, uno de los trabajadores de la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, y además presidente del Club 'Kayak-Polo Hispalense', conocido por su enfrentamiento con el Ayuntamiento hispalense, ha explicado a Europa Press que su centro de trabajo cuenta con un aparcamiento propio de "70 plazas", pero cuenta con una plantilla de "casi mil personas", toda vez que se trata de un lugar al que además "llegan personas de otros sitios para hacer consultas y trámites".

En ese sentido, ha explicado que la ampliación de la zona azul, que el 18 de junio pasará de 4.112 a 7.285 plazas al entrar en vigor el nuevo contrato de explotación adjudicado a Aparcamientos Urbanos de Sevilla (Aussa), como sociedad concesionaria de la gestión del estacionamiento en superficie regulado por precio, afecta a la calle Tabladilla pero deja al margen el tramo de la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural. No obstante, avisa de que toca de lleno el área de "influencia" en el que los trabajadores estacionan sus vehículos. "Es cuestión de dinero", ha dicho en cuanto a los pagos que afrontan los trabajadores por estacionar.

Y es que en los entornos de Bami y Tabladilla, la zona azul desembarca en 26 calles con un total de 1.767 plazas reguladas por precio público. Rodríguez ha explicado que en la concentración, que ha sumado "unas 200 personas", han participado también trabajadores del hospital Virgen del Rocío, quienes según su testimonio niegan que estén satisfechos con la puerta abierta por el Ayuntamiento para que los empleados que acrediten la necesidad de acudir al hospital en su vehículo privado y no tengan rentas altas gocen de abonos similares a los habilitados para los residentes del entorno.

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