SEVILLA, 28 Ene. (EUROPA PRESS) -
El ex director adjunto de la sociedad mixta Mercasevilla Daniel Ponce, imputado por un supuesto intento de cobro de comisiones ilegales a dos empresarios del grupo La Raza, sostuvo hoy ante el juzgado de lo Social número once que fue víctima de acoso laboral hasta su despido y que habrían prescrito los hechos por los que fue despedido. La directiva de la empresa, encarnada por Jordi Maymó, ha defendido el acto disciplinario y la Fiscalía cree que no se vulneraron los derechos fundamentales del demandante.
La representación jurídica de Daniel Ponce informó a Europa Press de que la vista oral, correspondiente a la demanda interpuesta contra su despido, se ha celebrado hoy desde las 11,30 horas hasta pasadas las 14,30 horas en el juzgado de lo Social número once.
A la vista oral han asistido tanto el propio Ponce, como Jordi Maymó, quien el pasado 6 de octubre entregó al ex director adjunto su carta de despido, solución que derivaba del expediente disciplinario incoado en su contra por los hechos investigados por el juzgado de Instrucción número seis.
La demanda formulada contra el despido, como se recordará, ya advertía de que Ponce fue despedido "por estar incurso en un procedimiento judicial, lo que atenta gravemente contra sus derechos fundamentales", porque de la carta de despido firmada por Maymó se desprende que "la sola inclusión en el procedimiento parece ser" la causa del despido. A tal efecto, advertía la representación jurídica de Ponce que el propio convenio colectivo de Mercasevilla exige "una sentencia firme por delito" para resolver la relación contractual, por lo que "la simple imputación" no podría ser causa de despido.
No obstante, la Fiscalía ha entendido hoy durante la vista oral que los derechos fundamentales de Daniel Ponce no han sido "vulnerados", según ha reconocido su representación jurídica, que ha insistido en que el ex director adjunto sufrió "acoso" y "mobbing" desde que fuera cesado tras la dimisión de Fernando Mellet, antiguo director general y su posterior cese.
La prescripción de los hechos esgrimidos para su despido, igualmente, es uno de los argumentos utilizados por la representación de Ponce, toda vez que la empresa ha negado que el aludido sufriese acoso y ha defendido el despido a cuenta de la situación particular de Ponce.
