ZARAGOZA 2 Abr. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Gallur, Antonio Liz, ha estimado que la nueva crecida del río Ebro a su paso por este municipio zaragozano es el "estacazo definitivo" para los cultivos de la zona, avenida que se suma a los dos meses y medio con el agua presente en los campos tras las primeras riadas de enero.
Según ha explicado en declaraciones a Europa Press, podrían ser unas mil las hectáreas afectadas, en las que "no solo peligra la cosecha de invierno, sino la de verano", ante la imposibilidad de trabajar y sembrar el terreno.
Además, "mucho me temo que no será esta la última riada" y ha pedido la limpieza del cauce del río, puesto que "a la vista de todos está que con un volumen de agua cada vez más pequeño las crecidas alcanzan cotas desmesuradas" y se asimilan más a crecidas extraordinarias por sus efectos que a las ordinarias.
También ha comentado que se han visto afectadas infraestructuras como caminos y riegos, cuyo arreglo va a ser un "trabajo duro", así como equipamientos municipales, como la zona deportiva al otro lado del río, el campo de fútbol, las antiguas piscinas y las instalaciones de piragüismo.