El presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón, entrega a María Luisa Lázaro, viuda de Javier Lambán, el Premio Gabriel Cisneros, concedido a título póstumo al expresidente de la Comunidad. - FABIÁN SIMÓN.
ZARAGOZA 4 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Sala de la Corona del Edificio Pignatelli, sede del Gobierno de Aragón, ha acogido este jueves el acto de entrega del III Premio Gabriel Cisneros 20205, a título póstumo, a Javier Lambán Montañes, presidente de la Comunidad Autónoma desde 2015 a 2023 y líder del PSOE aragonés, ejeano de raíz, un "gran constitucionalista" que vivió "intensamennte", fue "un luchador" y se comprometió con "su país, su tierra y su pueblo".
Así lo han puesto de manifiesto el presidente de la Comunidad Autónoma, Jorge Azcón, el exvicepresidente del Gobierno de España, Alfonso Guerra, quien ha realizado la loa a Lambán, y la viuda del politico aragonés, María Luisa Lázaro, quienes han intervenido en un evento que ha presidido el jefe del Ejecutivo autonómico, Jorge Azcón, y en el que ha actuado el grupo ejeano Tako, interpretando 'Suessetania' y 'Somos'.
Jorge Azcón ha calificado a Lambán de "gran constitucionalista y firme defensor del Estatuto de Autonomía", de forma que este galardón es "un acto de justicia en la memoria" de Gabriel Cisneros
Lambán "fue un devoto constitucionalista y un heredero directo de la conciliación nacional emanada de la Transición" y "tuvo el acierto y la altura de miras de reconocer a Gabriel Cisneros y de distinguirlo a título póstumo con honores. Ahora llega el momento de hacer justicia, lamentablemente también a título póstumo".
"Es fundamental reconocer el trabajo de aquellos servidores públicos honestos, coherentes y firmes, aquellos servidores públicos que ensanchan la democracia y construyen puentes en lugar de muros", ha aseverado Azcón.
El jefe del Ejecutivo autonómico ha proseguido afirmando que Javier Lambán fue "una figura aragonesa clave en la mejor etapa de la Historia de nuestro país, un servidor público que antepuso la Constitución, el entendimiento, el diálogo y la democracia por encima de intereses personales o partidistas".
"Primero España, luego el partido y, por último, la persona: Sin ningún género de dudas, el presidente Lambán fue exponente de esta cita y logró hacerla suya, aun siendo conscientes de los desvelos que pudo generarle", de forma que "no eligió un camino fácil para defender la Constitución".
Para él, "la Constitución, nuestro Estatuto de Autonomía y las instituciones estaban por encima de las siglas y de las personas, de todas las personas".
Azcón ha indicado que también que la bandera de Lambán era "la de la igualdad dentro de la España de las autonomías y la del respeto al orden" y "fue un referente conocido dentro de Aragón y también a nivel nacional".
LOA AL PREMIADO
Por su parte, Alfonso Guerra ha expresado su "nostalgia, melancolía y tristeza" por la ausencia de Javier Lambán y ha manifestado: "Lo hacemos vivir mientras vivamos nosotros porque los muertos viven en la memoria de los vivos ¿Será verdad que nada se deshace, que todo es inmortal aunque invisible?".
La presencia de Lambán es "eterna", ha continuado Guerra, indicando que de él aprendió que "el amor sigue siendo un vaso de locura" y ha "cantado" en nombre de Lambán "las palabras de luz, bondad, alegría, ejemplo y lección".
"Hay periodos en la vida en los que la tristeza se concentra, el sufrimiento se decanta hasta hacerse insoportable y nos destroza, nos marca tal vez para siempre. En casos como este, la vida se convierte en una absurda tragedia para la que no vale ningún consuelo", ha loado el exvicepresidente del Gobierno.
A esto ha añadido: "Uno lleva por dentro una tristeza sin límites, morirse ya no es grave, pero si no quiero olvidar, quiero también recordar los otros momentos, aquellos en los que la felicidad era tan perfecta que no somos conscientes de su fragilidad".
"Con todas las tragedias, como el vuelo de la vida de Javier, no puede empañar su alegría, cuando su agilidad para estar en todas partes casi al mismo tiempo, para llevar la voz".
Lambán fue "una persona singular, un hombre de convicciones democráticas y socialistas, y un hombre práctico" y "sabía que él dedicaba su vida a la lucha por su país, por su tierra y por su pueblo. Fue desde luego un hombre claro, claro para todo. También a la hora de enjuiciar los linchamientos".
"Él --ha continuado Guerra-- no entendía de posiciones de equilibristas, ni las de los que siempre son comprensivos con las persecuciones que fantasean para justificarlas con las razones políticas", afirmando que "ser español es temblar".
Ha recordado que Lambán dejó escritas sus memorias, 'Una emoción política' y entregó un libro sobre la reforma agraria durante la II República: "No se nos perderá su alma, su verdad, su legado de ejemplo y amor", ha dicho.
"Javier vivió intensamente, sinceramente, de forma comprometida, su compromiso fue directo, a boca llena, fue un luchador, un amigo, su familia, sus amigos, sus vecinos, sus compañeros, sus paisanos, pueden estar orgullosos de haberle tratado, de haber compartido penalidades y alegrías. Una vida muy humana, llena de afectos y de labores".
Alfonso Guerra ha aseverado: "No podemos aspirar a llenar el vacío de Javier entre vosotros, solo aspirar a que sepáis que vuestra soledad es también nuestra, que el recuerdo que para siempre tendréis es nuestro también". "Sus niñas hoy sienten la ausencia del abuelo, mañana estarán orgullosas de su amoroso abuelo, del abuelo que fue ejemplo y lección, un abuelo amoroso e importante".
Se ha dirigido a Lambán: "Javier, buen amigo, te hablo a ti, a ti te llamo, a ti te pido que sigas con nosotros. Tomaré las palabras de un hombre sencillo y sabio como tú, Miguel Hernández: Javier, a las saladas almas de las rosas, del almendro, de nata, te requiero, que tenemos que hablar de muchas cosas, compañero del alma. Compañero, aún en palabras del poeta, algo nos pide Javier".
"EJEANIDAD"
La viuda de Javier Lambán, Marisa Lázaro, ha señalado que el evento destilaba "ejeanidad", un término que alude a la "pertenencia a un espacio determinado, una específica manera de ver la vida, un vínculo especial que no se ha elegido, sino que pertenece a la patria de la infancia, la de Javier y la de muchos de quienes estamos aquí".
"Allí tejió sus afectos y sus aficiones. Allí quiso vivir", ha dicho Lázaro, quien ha mostrado su gratitud al presidente del Gobierno de Aragón por conceder a Lambán este premio a los valores constitucionales, que "adquiere vigencia en su legado".
Ha rememorado una albada de José Antonio Labordeta, para expresar: "Aunque me voy, no me voy. Aunque me voy, no me ausento. Aunque me voy de persona, me quedo de pensamiento. Efectivamente, Javier Lambán ha dejado aquí su pensamiento, su posición".
"Lo hizo con valentía, por el camino quizás menos fácil; militó en la coherencia de defender lo que consideró justo y eso, a veces, es incómodo, muy incómodo, pero también es tranquilizador con uno mismo, con su propia conciencia y con su inteligencia. Fue firme en la elección de su propia libertad. Entiendo que la concordia, la concordancia o la discrepancia eran dos caras imprescindibles".
Además, "aceptó, cuando le tocó, estar al lado de la mayoría, igual modo que lo hizo cuando se sintió en minoría, como decían en Ejea las gentes del campo, muy repartida, una expresión que pone en valor el respeto a la opinión de los demás".
"Todos sabemos cuál fue la posición de Javier en relación al texto, al espíritu y a la acción del texto constitucional: En su posición había mucho de esencia de lo aragonés, del respeto a lo pactado ante los ciudadanos, como extraído de nuestro derecho propio".
Al acto han asistido representantes de la mayoría de los partidos políticos, como el expresidente de las Cortes José Ángel Biel, el exdiputado constituyente Antonio Piazuelo y la ministra de Educación y secretaria general del PSOE Aragón, Pilar Alegría.