La directora general de Salud Pública, Nuria Gayán, y la jefa de servicio de Prevención y Promoción de la Salud, Begoña Adiego, en la presentación del informe del Día sin Juego 2023. - EUROPA PRESS
ZARAGOZA 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
De las 1.540 personas que inician un tratamiento por adicciones en 2022 en Aragón, casi un 10 por ciento --145 personas-- son comportamentales, es decir, que implican una dependencia a una actividad sin que implique consumo de sustancias. De ellas, el 82,4 por ciento son hombres y 120 son por trastornos relacionados con los juegos de azar, según el informe del Día sin juego 2023.
Estos son datos de las personas que inician tratamiento en 2022, con lo que no se incluyen aquellas que los han empezado en años previos, las que los han comenzado con posterioridad ni las que todavía no lo han hecho, por lo que son sólo "la punta del iceberg", ha apuntado la directora general de Salud Pública del Gobierno de Aragón, Nuria Gayán.
Las llamadas adicciones comportamentales incluyen, además de la dependencia al juego, mayoritaria, el uso compulsivo de Internet, las compras, el móvil, los videojuegos, las redes sociales o el sexo, entre otras.
Así, la adicción al juego es la de mayor prevalencia en todas las franjas de edad, excepto en las personas más jóvenes, las comprendidas entre los 10 y los 19 años, entre las que predomina el uso compulsivo de Internet, los móviles, las redes sociales o los videojuegos. En este sentido, la directora general ha alertado de que se detectan muchos videojuegos que incluyen dinámicas con juegos de azar.
Por el contrario, de las siete personas que empiezan tratamiento por adicción a las compras, seis son mujeres, mientras que en el caso de uso compulsivo de Internet, móviles, redes sociales o videojuegos lo hacen ambos sexos en la misma medida.
Entre las personas adictas al juego, 107 son hombres y sólo 13 mujeres y lideran las apuestas deportivas, sobre todo entre los jóvenes de entre 20 y 29 años, ya que los datos indican que el 76,5 por ciento de las personas que inician tratamiento en esta franja de edad es porque están enganchados a las apuestas.
En cuanto a las consecuencias, casi la mitad de los afectados --un 47,9 por ciento-- destaca que han sufrido problemas en el trabajo, los estudios o la salud, seguido de los problemas relacionales y conflictos familiares, que los señalan el 26,6 por ciento.
El informe recoge también que un 58,1 por ciento de las personas de entre 15 y 64 años han jugado con dinero durante 2022 y hasta un 96,6 por ciento usa habitualmente Internet con fines lúdicos.
Asimismo, un 5,3 por ciento de esa misma franja de edad ha accedido a juegos 'online', si bien la cifra se reduce ligeramente entre los estudiantes, de un 10,3 por ciento en 2019 a un 9,4 por cinto en 2021.
ACCIONES PARA REDUCIR LA DEMANDA Y LA OFERTA
Ante este escenario, la directora general de Salud Pública ha apostado por trabajar tanto para reducir la demanda como para reducir la oferta de juegos de azar, lo que implica acciones de información, de educación preventiva, ofrecer actividades alternativas de ocio saludable o modificaciones legislativas.
Así, para reducir la oferta es necesario limitar los locales, por ejemplo, lo que se está consiguiendo con la aprobación de la última Ley del Juego, que prohíbe la instalación o ampliación de establecimientos de juego o apuestas a menos de 500 metros de centros educativos y juveniles.
En cuanto a la demanda, ha abogado por trabajar desde edades tempranas en las habilidades sociales, educativas, así como en que los jóvenes conozcan los riesgos del juego y adquieran más recursos y autorresponsabilidad.
Del mismo modo, Gayán ha recomendado a padres y madres que supervisen el tipo de juegos al que acceden sus hijos y que no haya en los dormitorios dispositivos que permitan jugar porque "se creen que duermen, pero no duermen" y muchos menores acaban acudiendo a clase "y han dormido apenas dos horas".
Por último, ha destacado los Programas Especializados de Adicciones, en los que el Gobierno de Aragón colabora con comarcas y ayuntamientos de las tres provincias a través de convenios en los que advierten de que, en el caso del juego, "siempre lo mejor es no participar".
De esta forma, el Gobierno autonómico trabaja con los ayuntamientos de las tres capitales, así como con los de Jaca, Monzón, Alcañiz, Tarazona o Calatayud o las comarcas de Ribera Baja del Ebro, Jiloca, Bajo Aragón Caspe, Alto Gállego, Sobrarbe, Andorra-Sierra de Arcos, Cuencas Mineras o Ribagorza.
En cuanto al registro de autoprohibidos, que incluye a las personas que se restringen a sí mismos su entrada en los locales de juego o apuestas, han pasado en el último año de 4.122 a 4.480.