ZARAGOZA, 26 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Federación de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos de Aragón (FAPAR) ha manifestado que la implantación de la Ley Orgánica de la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE), este curso en primero, tercero y quinto de Primaria y el que viene en primero y tercero de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) y primero de Bachillerato "no mejorará nuestro sistema educativo" y por eso ha confiado "en su pronta derogación".
En una nota de prensa, la Federación ha lamentado que, "una vez más, nadie nos informe de los cambios a los representantes de las familias", después de que el pasado jueves, 22 de enero, la consejera de Educación de Aragón, Dolores Serrat, diera a conocer las novedades que supone la aplicación de la LOMCE en Secundaria y Bachillerato para el próximo curso en la Comunidad.
Para FAPAR, es un "desprecio" a las familias, "cuyos hijos e hijas soportan estos cambios", aunque "no nos sorprende por cuanto la ley nació sin consenso social, ni político" y "está siendo ampliamente rechazada, tiene admitidos siete recursos de inconstitucionalidad y hay un acuerdo político para su derogación, en la que nosotros confiamos por el bien de la sociedad en su conjunto".
La Federación ha sostenido que la Comunidad autónoma va a realizar una "aplicación pura y dura de la LOMCE, que venimos rechazando desde su aprobación, una reforma economicista, que sustituye la cooperación por la competencia".
A su entender, "considerar positiva la inclusión de numerosas optativas desde primero de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) contribuirá únicamente a generar más desigualdades entre el alumnado y entre los centros".
Además, "muchas de ellas se dejan a la autonomía de los centros", cuyos recursos humanos y materiales están "tan disminuidos en estos momentos, especialmente en Aragón, que es la Comunidad que más recorte ha tenido en estos últimos cuatro años, del 11 por ciento frente al 6 de la media estatal".
FAPAR ha sostenido que la "gran damnificada" de esta reforma "será la escuela rural", para apuntar que desde esta federación defienden "que las enseñanzas básicas y obligatorias deben ser comunes a todos".
ITINERARIOS
Esta organización de padres ha argumentado que los itinerarios, "que se inician oficialmente en tercero de la ESO, al elegir el tipo de matemáticas que luego condicionará el curso de cuarto, solo sirven para establecer dos categorías de enseñanzas, las de Bachillerato y las de Formación Profesional, claramente irreversibles".
Esto supone que "volvemos a degradar las enseñanzas de FP, tan necesarias para la sociedad y que tanto ha costado que tengan la consideración social que les corresponden".
Por otra parte, vincular la titulación de ESO y la de Bachillerato a la superación de pruebas "es una desmotivación para el alumnado que ya ha superado los cursos de la Secundaria y Bachillerato".
FAPAR ha reivindicado que los estudiantes obtengan su correspondiente titulación "sin necesidad de pruebas específicas, que pueden bloquear la continuidad de los estudios en el alumnado, especialmente en ESO, dejando a estos en vías muertas sin formación, ni futuro".
Para esta federación, "esto se había superado hace años, pero esta ley en lugar de mirar al siglo XXI, mira al siglo XX y así es imposible avanzar".
Finalmente, ha opinado que la supresión de asignaturas en valores "que deben ser comunes a todos los ciudadanos", como Educación para la Ciudadanía, "es dar la espalda a lo que la sociedad está solicitando para formar personas éticas y morales".
