SARIÑENA (HUESCA), 26 (EUROPA PRESS)
Más de 7.000 ciclistas han convertido el desierto de los Monegros en epicentro del mountain bike para celebrar el 25 aniversario de la Orbea Monegros. Una edición que se ha visto marcada por el fuerte viento, lo que ha añadido dificultad a la prueba sin afectar al buen ambiente.
El presidente de la Diputación Provincial de Huesca, Isaac Claver, ha acompañado a los participantes en la salida desde Sariñena, donde ha destacado la importancia de esta prueba para la actividad económica y la promoción turística de la comarca y de la provincia: "Eventos como la Orbea Monegros son un escaparate inmejorable para nuestra provincia. Apostar por el cicloturismo nos permite atraer visitantes durante todo el año que generan actividad económica y dan nuevas oportunidades a nuestros pueblos".
En ese sentido, se estima que más de 20.000 personas, entre ciclistas, familiares y visitantes, se han dado cita durante todo el fin de semana en la zona, generando un impacto económico de 1,5 millones de euros.
El director de la prueba, Juan Carlos Nájera, ha subrayado que "el compromiso de los ayuntamientos y de los miles de voluntarios que han trabajado en todas las ediciones ha sido fundamental para consolidar la Orbea Monegros como un referente internacional del ciclismo de montaña".
Procedentes de toda España y de más de 10 países, los deportistas han podido elegir entre dos recorridos: la maratón de 113 kilómetros y la media maratón de 86 kilómetros, ambas atravesando parajes emblemáticos como el Tozal de la Cobeta. Esta singular geografía esteparia que pone a prueba a los ciclistas ya ha visto pasar a más de 150.000 participantes en sus 25 años de historia.
Al finalizar la jornada, la organización rendirá homenaje a los municipios que forman parte del recorrido y a Grañén, origen de la prueba en 1999. El acto concluirá con una actuación del Dance de Sariñena, Fiesta de Interés Turístico de Aragón.