LA HOZ DE LA VIEJA (TERUEL), 15 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Museo del Pan de la Hoz de la Vieja, que recibe cada año cerca de 70 visitas, se ha convertido en un lugar en el que conocer la historia de la localidad y rendir homenaje a sus vecinos. A través de un recorrido por las etapas de la fabricación de este alimento básico, los visitantes aprenden cómo llegaba el trigo del campo a la mesa y cómo era la vida rural hace tan sólo unas décadas.
El antiguo horno del pueblo, que dejó de funcionar en los años 50, alberga en la actualidad este museo, que abrió sus puertas en el año 2000, tras ser recuperado por el Ayuntamiento y la Asociación Cultural 'La Foz y el Castiello'.
Este horno es, según ha explicado a Europa Press una de las guías del ahora museo, Carlota García, uno de los "mejor conservados" de la zona y, sin duda, "el mayor atractivo del municipio".
Cerca de 70 personas acuden cada año a ver este centro, que forma parte del recorrido turístico por la Comarca de las Cuencas Mineras, aunque según ha señalado García, la mayor parte de las visitas suelen concentrarse en los meses de primavera y verano. "Con el buen tiempo la gente se anima más a salir y el museo llama la atención", ha indicado la guía.
El proceso completo que se seguía para fabricar pan sirve de hilo conductor de la visita guiada, de una hora de duración. El labrado de la tierra, la siembra, la siega, el separado de la paja y el grano, la molienda, la elaboración de la masa y la cocción son las etapas que los turistas pueden conocer más de cerca.
En esta sala se encuentran también diferentes utensilios relacionados con esta tarea, desde yugos hasta arados, pasando por un molino del neolítico, trillos, el horno moruno, jarras de medir o canastas para la masa.
Este lugar rinde también homenaje a sus vecinos y explica cómo el horno servía como centro de la vida social y como punto de encuentro para los negocios, según ha apuntado García.
FOTOGRAFÍAS Y PLANTAS
El Museo del Pan cuenta con un edificio anexo, la Casa de Cultura, en cuyas escaleras se exponen cerca de cien fotografías que reflejan la vida rural de La Hoz de La Vieja desde 1870, año en el que está fechada la imagen más antigua.
Distribuidas por secciones, las instantáneas muestran familias al completo, escolares, imágenes religiosas y personajes ilustres del municipio, entre otros, para "perpetuar y dar a conocer la historia de la gente del pueblo", ha declarado la guía.
Las exposición de las fotos, cedidas por los vecinos, da paso a otra muestra, en esta ocasión de plantas autóctonas como el espliego, el tomillo, el romero, el té de roca, la manzanilla o la cola de ratón.
Cerca de 70 son las especies que pueden verse en esta sala, en la que también hay pequeña selección de plantas fósiles y un homenaje a la flor del azafrán, "que siempre ha estado vinculada a la historia del pueblo como motor económico", ha recordado García.
El horno puede visitarse durante todo el año previa petición de cita vía telefónica en el 677 798 725. El precio de la entrada, que incluye tanto el horno como las exposiciones anexas, es de dos euros para los mayores de siete años.
