El presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón, visita las obras del futuro Centro Integrado de Gestión de Emergencias de Aragón (Cigear). - EUROPA PRESS
ZARAGOZA 16 May. (EUROPA PRESS) -
Las obras de rehabilitación de la nave que albergará el futuro Centro Integrado de Gestión de Emergencias de Aragón (Cigear) --ubicada en la calle Isabel de Santo Domingo de Zaragoza, entre la avenida Cataluña y el polígono de Cogullada-- han comenzado este lunes y el objetivo es que el espacio esté operativo a finales de 2026. Entre las ventajas, según el presidente autonómico, Jorge Azcón, está que costará "poco dinero" --9 millones de euros--, ya que el Gobierno ha optado por rehabilitar un edificio de su propiedad que llevaba diez años sin uso.
Durante una visita a las obras, Azcón ha destacado que este nuevo centro de emergencias es "un proyecto con cabeza" y "bien pensado" desde el punto de vista del interés general, además de ser "operativo" y económico".
En primer lugar, ha recalcado que es "inexcusable" y "tiene todo el sentido del mundo" que los profesionales que atienden las emergencias en Aragón cuenten con "las mejores instalaciones".
En ese sentido, ha recordado que, "por desgracia", Aragón tiene experiencia en este tipo de eventualidades, como grandes incendios, inundaciones, nevadas; más recientemente, el apagón o la pandemia de la covid-19, u "otro tipo de emergencias en el futuro que ni siquiera imaginamos" relacionadas con el cambio climático, aunque también atenderá "esas pequeñas emergencias que surgen el día a día".
"Ojalá en un mundo ideal un edificio de emergencias como este no tuviera que ser utilizado nunca, pero sabemos que ha ocurrido y que va a volver a ocurrir", ha expresado Jorge Azcón, quien ha agregado que "no nos podemos acordar de la santa sólo cuando truena" y que es necesario trabajar de forma previa a la llegada de las emergencias.
A ello ha sumado que este edificio, que tiene una superficie total construida de 6.300 metros cuadrados, va a ser "operativo, eficiente y eficaz", después de que los redactores del proyecto se hayan reunido con los profesionales del sector para atender sus necesidades.
LA REHABILITACIÓN VA A AHORRAR DINERO
Por último, el jefe del Ejecutivo autonómico ha asegurado que optar por la rehabilitación de un edificio que llevaba más de diez años cerrado va a ahorrar "muchísimo dinero de los impuestos de los aragoneses". En concreto, el presupuesto de las obras asciende a 7,2 millones de euros, a los que hay que sumar otros 1,8 para el equipamiento, lo que arroja una cifra total de 9 millones de euros.
En cuanto a los plazos, la concesionaria, Construcciones López Navarro, ha empezado por las demoliciones, que se prolongarán hasta septiembre; los trabajos en la estructura se realizarán entre junio y octubre; en cubierta, de julio a noviembre; y el resto de labores de albañilería, instalaciones eléctricas y fontanería comenzarán en junio y está previsto que terminen en julio de 2026. El equipamiento se irá contratando antes de la conclusión de las obras para que las instalaciones estén operativas a finales de ese año e incorporará tecnología avanzada y recursos especializados orientados a optimizar la respuesta ante situaciones de emergencia.
Azcón ha subrayado también que este nuevo centro va a significar "una mayor coordinación y una respuesta más ágil y efectiva cuando sea necesario".
El edificio se articula principalmente en la planta baja, que abarca 4.920 metros cuadrados, mientras que las plantas primera y segunda cuentan con una superficie de 980 y 397 metros cuadrados respectivamente. Esta disposición permite una circulación más fluida y directa por el interior del edificio, facilitando el acceso y uso de las instalaciones por parte de todos los servicios operativos, sin generar obstáculos físicos.
"El corazón" del edificio lo conformará la sala de teleoperación y movilización, en la que se organizarán el 061 y el 112, que ocuparán 539 metros cuadrados.
Asimismo, el centro contará con un centro de coordinación de incendios forestales, de movilización de ambulancias medicalizadas del 061, de recursos de Protección Civil y academias autonómicas de Policía Local y Bomberos.
Completarán las instalaciones salas de formación y reniones, servicios, vestuarios y las nuevas dependencias de la Policía Nacional adscrita al Gobierno de Aragón, que actualmente se encuentran en la zona Expo y cuyo traslado supondrá "un ahorro muy importante" en el pago de alquileres.
La reorganización del espacio interior incorpora patios verdes que estructuran las instalaciones en módulos funcionales, agrupando las oficinas según los diferentes grupos de emergencias, así como las salas de formación y reuniones, servicios y vestuarios.
ESPACIO PARA OTROS SERVICIOS DE EMERGENCIA
Además, Azcón ha remarcado que esta nueva infraestructura contará con espacio suficiente no sólo para los servicios de emergencia autonómicos, sino que podrán incorporarse también otros de titularidad local, provincial o estatal, entre los que ha citado la Policía Local de Zaragoza, los Bomberos, la Policía Nacional y la Guardia Civil.
El edificio tendrá dos accesos en su planta baja, uno de los cuales dará entrada directamente al centro de emergencias, mientras que el otro será el que utilizará la Policía adscrita, con el objetivo de permitir un funcionamiento "independiente y diferenciado", pero que a la vez estén "coordinados y puedan cooperar en cualquier momento".
El presidente aragonés ha resaltado también la "perfecta" ubicación de la parcela, entre el tercer y el cuarto cinturón de Zaragoza, desde el punto de vista de la movilidad y de la agilidad para respondar a las emergencias.
En lo relativo al estado del edificio, ha señalado que la fachada se va a conservar, pero se van a mejorar los aislamientos térmicos o las carpinterías. Además, la cubierta tendrá placas solares que permitirán ahorrar energía, aunque no hasta el punto de que las instalaciones sean autosuficientes.
En esta línea de ahorro, la nueva distribución de la nave, con espacios más pequeños para despachos o salas de reuniones, también permitiré reducir significativamente el gasto en climatización. De la misma manera, como el uso anterior de este edificio era el de 'call center', todas las infraestructuras de telecomunicaciones serán reutilizadas.
Por último, Azcón ha incidido en que el proyecto ha prestado especial atención a la ventilación y la luz natural, lo que también significará "un importante ahorro de cara al futuro".