Un proyecto de innovación docente permite usar un simulador estático para la formación de medicina de urgencias

Simulador Estático De Cabina HEMS
UNIVERSIDAD DE ZARAGOZA
Actualizado: miércoles, 15 junio 2011 20:45

ZARAGOZA 15 Jun. (EUROPA PRESS) -

Los alumnos del Máster en Medicina de Urgencia en Montaña de la Universidad de Zaragoza (UZ) se entrenan estos días para poder atender emergencias sanitarias en situaciones adversas, incluidas las que pueden surgir en un vuelo tras el rescate de heridos o accidentados, utilizando un simulador estático de cabina HEMS, del que disponen gracias al proyecto de innovación docente financiado por la UZ y la empresa INAER, colaboradora en estas prácticas.

El simulador estático permite que los alumnos practiquen cómo atender un caso clínico, mientras la cabina reproduce el escaso espacio de un helicóptero y las incidencias del propio vuelo. Al mismo tiempo, el resto de compañeros pueden seguir en directo desde el exterior la resolución del caso gracias a un circuito de televisión.

Los 48 médicos y enfermeros del máster adquieren éstas y otras habilidades a lo largo de esta semana en el módulo que se realiza en los refugios de refugio 'Rabadá y Navarro', en Camarena de la Sierra (Teruel), ha informado la Universidad de Zaragoza en un comunicado.

Además, los alumnos han podido realizar sus prácticas en un helicóptero real, que durante este miércoles ha efectuado hasta 48 viajes de entrenamiento --uno con cada profesional--, en un viaje de unos 10-15 minutos, denominado de acomodación, y en el que han atendido una emergencia sanitaria mientras volaban.

En el vuelo de acomodación se evalúa la actitud del alumno al vuelo y la adaptación a nuevas fuerzas gravitacionales y anti-gravitacionales durante el mismo, ha explicado la institución académica.

El módulo está diseñado para que el alumno, médico o enfermero, adquiera conocimientos suficientes, habilidades y destrezas para activar la alarma, establecer estrategias de prevención y gestión del riesgo, así como progresar con seguridad en la montaña, por un lado, y obtener la cualificación pertinente, según la normativa europea, para formar parte de la tripulación de un helicóptero de emergencias médicas, por otro.

Estas prácticas como tripulantes de cabina son valoradas muy positivamente, pero no pueden repetirse dado que se realizan con helicópteros reales. El costo de la hora de vuelo (pilotos, queroseno, mantenimiento y revisión) es muy elevado y el alumno sólo puede realizar un vuelo de acomodación y una práctica de asistencia sanitaria, han apuntado desde la UZ.