ZARAGOZA, 5 May. (EUROPA PRESS) -
El Consejo de Gobierno ha tomado conocimiento de las actuaciones urgentes que realiza el Instituto Aragonés del Agua (IAA) y la empresa pública SARGA para paliar los daños causados en los abastecimientos y sistemas de saneamiento y en las infraestructuras de riego a causa de los desbordamientos de los ríos Matarraña, Guadalope y Huerva, ocurridos el mes de marzo.
El IAA está actuando en 12 municipios y el coste total es de 3.330.349 euros, ha informado el Gobierno de Aragón en una nota de prensa. De ellos, 2,4 son para acciones en el Matarraña, donde se interviene en nueve municipios.
La obra más costosa tiene lugar en Monroyo, para la reparación y adecuación del abastecimiento, cuyo importe se eleva a 943.134 euros. En Peñarroya de Tastavins, las actuaciones tienen un monto de 295.179 euros; en Mazaleón, 213.105 euros, y en Nonaspe 201.679 euros, ya que ha sido necesario además reparar y adecuar el azud de la captación.
En Lledó, las obras de reparación del abastecimiento se presupuestan en 179.987 euros, mientras que en Calaceite es preciso destinar 179.987 euros. El resto de actuaciones de suministro en el Matarraña son las de Cretas (146.869 euros), Arens de Lledó (143.990 euros) y Valdeltormo, con 126.711 euros.
En el río Guadalope, el desbordamiento afectó a la estación depuradora de aguas residuales de Alcañiz, donde es preciso invertir 663.793 euros. Por su parte, en el Huerva han sido precisas dos actuaciones, la reparación del abastecimiento de Tosos, con 204.465 euros, y el colector del Huerva, con 31.445 euros.
UN MILLÓN DE EUROS PARA SARGA
Asimismo, los trabajos que el Gobierno de Aragón encargará a la empresa pública SARGA para reponer las infraestructuras relacionadas con el riego en distintas cuentas de la Comunidad autónoma que se vieron afectadas por las riadas de las últimas semanas tienen un coste de 1.060.682 euros.
Estas actuaciones cuentan con la declaración de emergencia y se reparten entre las cuencas de los ríos Matarraña, Guadalope, Aguas Vivas, Huerva, Jalón, Huecha, Queiles y afluentes.
En la mayor parte de los casos, se trata de afecciones a infraestructuras hidráulicas propiedad de comunidades de regantes como acequias, azudes, pozos, tuberías y sifones.
