Cualquier discriminación a la población femenina solo por ser mujer es violencia, advierte el Consejo de Mujeres

GIJÓN, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -

La alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón (Foro), como presidenta a su vez del Consejo de Mujeres de la ciudad, ha dejado claro que cualquier discriminación hacia la población femenina solo por el hecho de ser mujer también es violencia.

Moriyón, en el acto de lectura de los ocho puntos por el 8.M en el Salón de Recepciones municipal, con motivo de la celebración este viernes del Día Internacional de la Mujer, ha destacado que el lema de este año, 'Mujeres adelante, ni un paso atrás', invita a seguir luchando por los derechos de las mujeres.

Ha destacado, igualmente, que el Consejo de Mujeres, que ha cumplido ya 30 años de funcionamiento, ha sido "motor de cambio y estímulo para las mujeres gijonesas". Ha incidido, además, en que ha luchado contra todas las violencias que se ejercen contra las mujeres.

"No es momento de recortar recursos en medidas y políticas de igualdad", ha resaltado, sino, al contrario, cree que es precio impulsar medidas en pro de la igualdad. Es por ello, que ha agradecido las reivindicaciones plasmadas en la Carta por la Igualdad y se ha mostrado segura que el Consejo de Mujeres continuará haciendo de Gijón una ciudad "más igualitaria y justa".

La alcaldesa, asimismo, ha tenido palabras de recuerdo para Teresa Escudero García, ya fallecida, una mujer "indispensable", según ella, en el movimiento vecinal y que representó a las vocalías de la Federación vecinal en el Consejo de Mujeres hasta que su enfermedad la apartó de sus responsabilidades. En honor a ella, ha pedido guardar un minuto de silencio.

En cuanto a la lectura de los ocho puntos, el Consejo de Asociaciones de Mujeres de Gijón, en primer lugar, ha apostado por que todas las mujeres tengan a empleos sostenibles, salarios y pensiones dignas, para acabar con la brecha salarial y la feminización de la pobreza. En este sentido, han considerado que la pobreza y la desigualdad también son violencia hacia las mujeres.

Además, han reclamado la eliminación efectiva de barreras que impiden a las mujeres llegar a los puestos de decisión en los poderes públicos, económicos o de cualquier otro tipo. También ha visto importante promover la educación afectivo-sexual en los centros educativos y defender el derecho al aborto "libre, seguro y gratuito". Al tiempo, ha mostrado su rechazo al alquiler de vientres que mercantiliza el cuerpo de las mujeres.

Asimismo, ha reivindicado una educación con perspectiva feminista y que esta última se desprenda de las creencias patriarcales. También ha abogado por el reparto de las tareas de cuidados entre hombres y mujeres para la equidad, entendida como la igualdad de oportunidades. Y es que, para el Consejo, la falta de implicación de los hombres en las tareas de cuidados también es violencia hacia las mujeres.

Por otro lado, ha considerado importante empoderar a las mujeres con diversidad funcional y que se les dote de herramientas necesarias para el ejercicio efectivo de sus derechos. También han reclamado abolir la prostitución como una de las formas execrables de explotación y han exigido el desarrollo y cumplimiento íntegro del Pacto de Estado contra la violencia de género, dotándolo de las partidas presupuestarias adecuadas. "No es no", han gritado al unísono al término de la lectura.