Sucesos.- Ingresan en prisión tres detenidas en Asturias en relación a la red que captaba mujeres para prostituirlas

Actualizado: martes, 27 mayo 2008 15:13

En el local ubicado en la localidad sierense de Granda fueron encontradas más de 60 mujeres de diferentes nacionalidades

OVIEDO, 27 May. (EUROPA PRESS) -

Tres de las cuatro mujeres detenidas en Asturias en relación al grupo organizado que se dedicaba a la captación de mujeres en países de fuera de la UE para explotarlas sexualmente en España han ingresado en prisión, según informaron fuentes policiales a través de una nota de prensa. En el local ubicado en la localidad de Granda (Siero) fueron localizadas más de 60 mujeres de diferentes nacionalidades, según informaron fuentes policiales a través de una nota de prensa.

En el marco de la operación se han detenido un total de ocho miembros del grupo de carácter transnacional que presuntamente captaba las mujeres en Moldavia para prostituirlas en España. En la operación fueron registrados, además del club de Granda, considerado uno de los más importantes de Asturias, otro en la localidad madrileña de Pedrezuela.

Agentes de la Policía Nacional han detenido a ocho miembros de un grupo organizado de carácter trasnacional que presuntamente captaba mujeres en Moldavia para explotarlas sexualmente en nuestro país. En la operación han sido registrados dos clubes de alterne en las localidades de Pedrezuela, en Madrid, y Granda-Siero, en Asturias, entre los que había claros vínculos ya que intercambiaban mujeres de forma habitual.

Además de los ocho detenidos, hay dos personas imputadas por diversos delitos, así como veintiocho mujeres arrestadas por estancia irregular en el país. En la operación se han intervenido, entre otros efectos, 38.000 euros en efectivo, una piedra de cocaína en roca, varias armas blancas y abundante documentación.

Los detenidos en Asturias son cuatro mujeres, tres de ellas de nacionalidad sudamericana. Las que ingresaron en prisión son M. A. B., de 28 años y natural de Paraguay, detenida por un delito contra la salud pública y estancia irregular; K. M. G., de 22 años y de Colombia, también por estancia irregular y delito contra la salud pública; y V. M. D., de 31 años y natural de Brasil, por estar reclamada por un jugado para ser ingresada en prisión. La cuarta detenida es M. T. I.B, de 41 años y natural de Burgos y domicilio en Oviedo, como presunta autora de los delitos de detención ilegal, amenazas contra la integridad moral, delitos relativos a la prostitución y favorecimiento de la inmigración ilegal.

La operación se inició a principios del mes de marzo y ha sido coordinada por la Brigada Central de Redes de Inmigración de la Comisaría General de Extranjería y Documentación. También han participado agentes de la Policía Científica y de las Jefaturas Superiores de Policía de Madrid y Asturias.

DENUNCIA DE UNA VÍCTIMA.

Las investigaciones se iniciaron el pasado mes de marzo, tras las denuncias presentadas por la mujer de nacionalidad moldava y dos hombres españoles, en las que ponían al descubierto la actuación de una red de ciudadanos procedentes de Moldavia.

El grupo, perfectamente organizado y coordinado con dos clubes de alterne de España, se dedicaba a captar mujeres en su país mediante engaño, ofreciéndolas falsas ofertas de trabajo en España, cuando el verdadero fin era explotarlas como prostitutas en los dos clubes de alterne situados en Pedrezuela y Granda-Siero. Sus responsables tenían establecidos acuerdos para acoger a las mujeres en sus locales y, al parecer, estaban al corriente de la procedencia y situación de las mismas.

La víctima manifestó a los investigadores que fue engañada en Moldavia y después trasladada en avión hasta España en compañía de uno de los miembros del grupo. Antes de llegar a nuestro país, le obligaron a emplear un pasaporte rumano falso de gran calidad que la organización había preparado a su nombre.

Después fue recogida en el aeropuerto por otros dos compatriotas que la llevaron a un piso en Madrid donde le indicaron que debía trabajar en un club ejerciendo la prostitución. Ante su negativa, la encerraron en el domicilio y durante varios días recibió palizas, amenazas y todo tipo de humillaciones.

TRASLADO A LOS CLUBES.

Días más tarde la trasladaron al club situado en Pedrezuela donde se entrevistaron con sus responsables y les informaron de su negativa a prostituirse. Fue nuevamente encerrada en una de las habitaciones y agredida durante algo más de un mes, teniendo incluso que recibir atención médica por las lesiones. Entonces la llevaron al club de Asturias donde la mujer siguió manteniendo la misma actitud, por lo que fue nuevamente agredida hasta que logró huir del local.

La joven, que fue localizada por los responsables del club, consiguió nuevamente darse a la fuga y se mantuvo oculta durante más de un año ante el temor de que pudiera sufrir las represalias de sus captores.

Las investigaciones realizadas por los agentes permitieron corroborar los hechos descritos en las denuncias y permitieron establecer claros vínculos entre los dos clubes, comprobando que se intercambiaban a las mujeres de forma habitual.

Por todo ello, y con los oportunos mandamientos judiciales, se procedió a la entrada y registro simultáneo de los dos locales. En total fueron detenidas ocho personas a las que, según los casos, se les imputan los presuntos delitos de favorecimiento de la inmigración ilegal, relativo a la prostitución, detención ilegal, agresión sexual, lesiones, amenazas, contra la integridad moral, asociación ilícita y contra la salud pública. Otras dos personas han sido, además, imputadas por omisión del deber de socorro y por delito relativo a la prostitución.

ANTERIORES OPERACIONES. En lo que va de año, la Jefatura Superior de Policía de Asturias ha llevado a cabo dos operaciones relevantes relacionadas con tráfico de seres humanos. El día 27, una joven de nacionalidad rumana consiguió escapar de la red, compuesta por tres hermanos, también rumanos, dos mujeres y un hombre, que la mantenían encerrada en un piso en Oviedo, a la cual agredían y obligaban a prostituirse bajo la amenaza de matar ala familia.

En la operación se detuvieron a dos mujeres y se dió a la fuga una tercera persona que inicio las mismas actividades en un nuvo grupo que fue desartiulado en Gijón en el marco de la operación 'Dora', cuya investigación se inició a raíz de la denuncia de una familia rumana que sospechaba que su hija podía haber sido secuestrada y sospechaban que podía esetar siendo obligada a ejercer la prostitución en un club de alterne de Gijón.