Nueve secuoyas gigantes de entre 28 y 35 metros de altura figuran en el listado cántabro de árboles singulares

Actualizado: miércoles, 19 agosto 2009 14:09

SANTANDER, 19 Ago. (EUROPA PRESS) -

En Cantabria hay catalogadas en el listado de árboles singulares nueve secuoyas gigantes, de entre 28 y 35 metros de altura, todas ellas en un estado de conservación muy bueno o excelente. Aunque este tipo de árbol, de la familia de la secuoya, es originario de las zonas húmedas de California, también está muy difundido por parques y jardines de toda Europa.

Según datos del catálogo de la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Biodiversidad, recogidos por Europa Press, los nueve ejemplares incluidos en el inventario tienen unas dimensiones que oscilan entre 28 y 35 metros de altura y entre 8 y 3,5 metros de perímetro, en función de si se toma la medida en la base o se tiene en cuenta la medición a 1,3 metros de altura, que es el perímetro normal.

Los tres ejemplares más grandes se sitúan juntos en la finca Artalijo, en La Cavada, junto a la carretera que sube a Alisas. Su altura es de 35 metros y sus perímetros en la base van desde 5 a 8 metros. No obstante, el perímetro normal (a 1,3 metros) oscila entre 3,5 y 5,9 metros.

Pese a la espectacularidad de estos árboles, no son los de mayores dimensiones en esta especie. Ya que en otros lugares del mundo se pueden llegar a encontrar secuoyas gigantes de hasta 100 metros de altura y de tales proporciones que, incluso, existía un ejemplar que tenía un túnel en su tronco a través del cual discurría una carretera.

Los otros seis ejemplares singulares existentes en Cantabria se encuentran en otros municipios. Así, en Cabezón de la Sal, en el jardín del instituto de Igareda, hay dos secuoyas gigantes de 30 y 32 metros de altura; y en Arenas de Iguña, en la finca La Molina, hay otras dos, ambas de 30 metros.

Asimismo, en la finca La Picota, de Renedo de Piélagos, se puede observar otro de estos ejemplares, de 28 metros de altura; y en la finca Cervatos, en Bárcena de Pie de Concha, hay otra también de 28 metros.

En algunos de estos lugares las secuoyas gigantes conviven con otras secuoyas. Por ejemplo, en la finca La Molina, de Arenas de Iguña, hay una secuoya de 35 metros de altura y 8,5 de perímetro en la base; y otra de 30 metros de alto y 11 de perímetro en la base.

Además, en la finca Los Hoyos, en Santiurde de Toranzo, hay una secuoya de 25 metros de altura; y en la finca La Quinta de San Raimundo de Barcenaciones (Reocín) otra de 35 metros.

Las secuoyas y las secuoyas gigantes pertenecen a la misma familia y alcanzan en ambos casos grandes dimensiones y gran longevidad. Así, se han datado ejemplares de secuoya de más de 1.000 años y secuoyas gigantes de hasta 3.000 años.