La ciclogénesis explosiva, principal 'culpable' de las 947 hectáreas arrasadas por el fuego en enero en España

MADRID 28 Feb. (EUROPA PRESS) -

La ciclogénesis explosiva, un fenómeno extremo de carácter violento y cercano al ciclón registrado el pasado mes en España fue el principal 'culpable' de las 947 hectáreas de superficie arbolada arrasadas por el fuego, según se desprende del último informe de coyuntura ambiental del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM).

Este fenómeno atmosférico azotó la Península desde el 23 al 25 de enero y se caracteriza por una intensa y profunda borrasca extratropical de origen Atlántico, que barrió de oeste a este España y que produjo graves pérdidas, debidas principalmente al intenso viento con rachas huracanadas que arrastra.

Además, el riesgo de incendios forestales permaneció bajo prácticamente todo el mes, coincidiendo con el fenómeno de ciclogénesis explosiva, que sobre todo afectó a la zona mediterránea debido al fortísimo viento de poniente, especialmente desecante en esa zona.

Por otro lado, la superficie arbolada arrasada por el fuego, 947 hectáreas, se ha multiplicado casi por seis en enero de 2009 respecto al mismo mes de 2008, cuando ardieron 163,43 hectáreas, y que supone más de un 63 por ciento que la media de los diez últimos años, según datos del MARM, a los que ha tenido acceso Europa Press.

De este modo, el comienzo del año se convierte en el tercer peor registro del decenio, sólo por detrás de 2002 (2.248 hectáreas) y 1999 (1.406 hectáreas). Además, la práctica totalidad de la zona arbolada pasto de las llamas se registro en el Mediterráneo (más del 98 por ciento).

Por el contrario, la superficie de matorral y monte abierto que ha ardido bajo los incendios (560,18 hectáreas) desciende un 71 por ciento en enero de 2009 frente al mismo periodo de 2008 y en una proporción similar respecto a los valores medios de los diez últimos años. En este caso, casi la mitad de los siniestros (48 por ciento) se han concentrado en el noroeste del país.

EN CONJUNTO, TENDENCIA A LA BAJA

Sin embargo, al computar el conjunto de la superficie forestal quemada, enero de 2009 mantiene la tendencia positiva registrada en años anteriores, ya que en total en el pasado mes ardieron 1.560 hectáreas de superficie forestal (0,006 por ciento del territorio), menos de la mitad que en el mismo mes del año anterior (3.269,32 hectáreas) y que la media del decenio, con 3.270 hectáreas.

Tres de cada cuatro hectáreas arrasadas este año se sitúan en el Mediterráneo, mientras que en la zona noroeste de España ha ardido el 22 por ciento de la superficie calcinada y en el interior, un 2,8 por ciento.

En total, en los primeros 30 días del año los siniestros se redujeron en más de un tercio, pasando de 787 en 2008 a 235 en 2009. Concretamente, 142 fueron conatos (menos de una hectárea) frente a 411 de 2008, y 93 fueron incendios, frente a 376 en 2008.

No obstante, este año ya se ha registrado un gran incendio (más de 500 hectáreas) en enero, algo que sólo ha ocurrido otro año más en esta década, en 2003. En aquel año un incendio del que se acusó a un pastor de ovejas arrasó 1.240 hectáreas en Maçanet de la Selva (Gerona). En esta ocasión, el fuego acabó con unas 1.070 hectáreas en La Nucía (Alicante).

2001 Y 2006, LOS MEJORES ENEROS

Los mejores eneros en materia de incendios fueron 2001 y 2006, cuando se quemaron 353,60 y 442,56 hectáreas de superficie forestal respectivamente. En cuanto al periodo actual, es el cuarto con menos incendios del decenio y el sexto en cuanto a superficie forestal afectada.

En 2008, las comunidades autónomas del cuadrante noroeste español fueron las más afectadas por el fuego, que se confirmó como el mejor año del decenio en materia de incendios forestales. Así, la región más afectada fue el Principado de Asturias, seguida por Cantabria, Castilla y León y Galicia. Por el contrario, las menos afectadas por el fuego fueron Ceuta y Melilla, Baleares, Cataluña y Extremadura.

Según datos del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, la comunidad autónoma más afectada por el fuego en 2008 fue el Principado de Asturias, donde resultó afectada el 0,683 por ciento de su superficie, que equivalente a 4.555 hectáreas, quemadas en 1.132 incendios (más de 1 hectárea) y 835 conatos (menos de una hectárea). En segundo lugar, por territorio afectado se situó Cantabria, donde el fuego afectó al 0,653 por ciento del terreno, que equivale a 2.026 hectáreas, que ardieron en 31 conatos y 176 incendios.

Por su parte, Castilla y León fue el año pasado la comunidad autónoma con mayor número de hectáreas arrasadas, aunque por su extensión, el fuego afectó al 0,338 por ciento de su territorio, en 1.010 conatos y 986 incendios. También Galicia fue de las más perjudicadas por las llamas en 2008, al quemarse el 0,308 por ciento del territorio en 711 incendios y 1.853 conatos.

En el lado contrario, Melilla no registró ningún fuego ni conato y Ceuta, tan solo un incendio, que quemó 2,10 hectáreas, es decir el 0,157 por ciento del terreno. En Baleares, en 4 incendios y 117 conatos se quemaron un total de 24,62 hectáreas, mientras que en Cataluña ardieron 417 hectáreas en 53 incendios y 380 conatos, que supusieron el 0,026 por ciento de su territorio.

Así, a fecha de 31 de diciembre de 2008, en toda España fueron arrasadas un total de 40.977,46 hectáreas, es decir el 0,154 por ciento de la superficie del país. Este dato es incluso menor que la mitad que las hectáreas forestales que ardieron en 2007 a causa del fuego (86.112,53 hectáreas) y casi un 70 por ciento menos que la media de la década (131.774,54).

Igualmente, el periodo comprendido entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2008 destaca por el bajo número de grandes incendios (más de 500 hectáreas), siendo 31 la media del decenio. Más de la mitad de los fuegos, el 51,4 por ciento, se localizaron en el noroeste del país.