SANTANDER, 29 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Servicio de Guardería Fluvial de la Confederación Hidrográfica del Norte (CHN) --dividida en la actualidad en la Confederación del Miño y el Sil y la del Cantábrico-- está constituido por un total de 43 guardas, seis de los cuales se encuentran en Cantabria.
A través de siete oficinas coordinan y distribuyen el trabajo de vigilancia e inspección de los cauces que configuran el territorio de la cuenca y que está repartido en doce provincias, según el Plan de Actuación de la Confederación para este año recogido por Europa Press.
Así, en Galicia se encuentran la oficina de Orense, cuyos guardas controlan el territorio correspondiente a Orense, Pontevedra y Zamora; y la oficina de Lugo, que controla la zona correspondiente de dicha provincia.
Desde la oficina de Asturias se dirigen las labores de guardería de dicha Comunidad Autónoma y los términos municipales de Oseja de Sajambre y Posada de Valdeón, pertenecientes a la provincia de León.
Por su parte, la oficina de Santander coordina las labores de los guardas de Cantabria, mientras que la oficina de Ponferrada se limita a la zona noroeste de la provincia de León.
Por último, en el País Vasco se encuentran las oficinas de Bilbao, cuyo trabajo se extiende por las provincias de Álava, Burgos y Vizcaya, y la oficina de San Sebastián, que abarca Guipúzcoa y la parte correspondiente de Navarra.
