SANTANDER 20 Dic. (EUROPA PRESS) -
Un total de 28 establecimientos cuentan con la autorización de la Delegación del Gobierno en Cantabria para vender material pirotécnico durante el periodo navideño, en concreto desde este viernes, 20 de diciembre, al 6 de enero.
Estas tiendas están situadas en Santander (13), Torrelavega (3), Castro Urdiales, Boo de Guarnizo, Igollo de Camargo, Laredo (2), Reinosa, Colindres, Sobremazas, Bezana (2), Hazas de Cesto y Quijas, según ha informado la Delegación del Gobierno en un comunicado.
La Delegación del Gobierno ha recordado que existen una serie de normas que regulan la venta en los establecimientos autorizados, que en caso de no ser respetadas suponen la incoación de expediente sancionador por infracción grave o muy grave contra la L.O. de Seguridad Ciudadana.
Así, está terminantemente prohibida la venta ambulante y los establecimientos autorizados para la venta y almacenamiento de productos pirotécnicos, entre el 20 de diciembre y el 6 de enero, deberán cumplir con numerosos requisitos en materia de seguridad, tanto ciudadana como de carácter industrial.
Por consiguiente, es muy importante adquirir estos productos en establecimientos autorizados, ya que sólo así se garantiza que el material está en perfecto estado y que se acompaña de las instrucciones necesarias para una adecuada manipulación y, por tanto, evitar accidentes.
Todos estos establecimientos disponen del indicativo 'Pirotecnia Segura' que certifica su autorización para la venta de petardos y resto de productos pirotécnicos.
Igualmente, se recuerda que la manipulación irregular de estos productos puede provocar lesiones muy graves, por lo que resulta imprescindible adoptar todas las medidas de precaución que establecen los fabricantes de estos productos.
Entre otras medidas, destaca no encender nunca productos pirotécnicos en interior a no ser los específicamente diseñados para ello; no disparar contra personas, vehículos, edificios y animales; no sostener con las manos una vez encendidos, a excepción de las bengalas; no guardar nunca productos pirotécnicos en bolsillos o bolsos de mano durante mucho tiempo; y comprobar siempre la dirección del viento antes de encender un producto, evitando hacerlo con rachas superiores de los 25 kilómetros por hora.