SANTANDER, 21 Feb. (EUROPA PRESS) -
El sindicato STEC ha pedido que algún responsable de la Consejería de Educación del Gobierno de Cantabria "dé la cara", "rinda cuentas ante la opinión pública" y, en última instancia, se depuren responsabilidades ante el "estrepitoso fracaso" de las becas BIP, de Iniciación a la Profesión Docente, que han supuesto un "desastre".
En un comunicado, el sindicato señala que de las 500 plazas ofertadas, sólo han sido ocupadas 180, es decir, el 64% de las becas han quedado desiertas.
Por tipo de enseñanza, de esas 180 plazas, 114 se han cubierto en colegios de Infantil y Primaria, y 66 en centros de Secundaria, agrega STEC. Y según el centro, 83 becarios ocuparán una plaza en centros públicos (el 46%) y 97 en colegios privados (el 54%).
"Las cifras son más que llamativas y ponen en evidencia los errores de planificación que se han cometido", señala el sindicato, para enfatizar que "prácticamente dos de cada tres plazas" se han quedado "sin ocupar", pese a ser "uno de los proyectos estrella de la Consejería".
Pero "el programa de becarios ha sido un fracaso estrepitoso", insiste el sindicato, que pone como ejemplo también que en la red pública había casi 3.300 docentes que reunían las condiciones para ser tutor, pero "sólo 220" han solicitado participar en el programa.
"El 93,3% del profesorado de los centros públicos no ha querido ser tutor, a pesar de los incentivos con los que la Consejería ha querido engatusar a los docentes", ha señalado STEC.
