SANTANDER, 1 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Santander ha declarado en estado de ruina inminente el inmueble correspondiente al número 2 del Paseo Pérez Galdós que data, según el Catastro, de antes de 1920, y ha ordenado su derribo.
Según ha informado en nota de prensa el concejal de Infraestructuras, Urbanismo y Vivienda, César Díaz, en caso de que la propiedad no ejecute la orden de derribo, el Ayuntamiento la acometerá por ejecución subsidiaria, reclamando posteriormente el coste de los trabajos a los propietarios del inmueble.
La construcción, que cuenta con planta baja, primera y ático, se compone de muros de carga de ladrillo, estructura de madera y cubierta de teja sobre ripia.
Según constatan los informes técnicos, el edificio se encuentra en estado de completo abandono y presenta un mal estado generalizado, con grandes grietas vivas en las fachadas y una cubierta con fuertes asentamientos que pueden provocar derrumbes.
Asimismo, advierte de que las grietas existentes en la esquina norte han sufrido un aumento de tamaño en los últimos años, lo que significa que el desplome del muro lateral continúa su proceso.
Los aleros están desplomados, algunos de ellos ya caídos, y es previsible que se puedan producir nuevos desprendimientos. Lo mismo ocurre con las fachadas, en las que se manifiestan grietas, desplomes y derrumbes parciales.
Por su parte, las carpinterías están absolutamente inservibles o desaparecidas y la cubierta muestra áreas semihundidas, filtraciones y viguetas podridas.
Por todo ello, el informe técnico establece que el edificio se encuentra en situación de ruina inminente derivada del agotamiento generalizado que presenta la estructura de fachadas y cubierta, y su deterioro es de tal envergadura que se considera totalmente inviable proceder a su recuperación, por lo que se ordena su derribo.
AYUDAS PARA EDIFICIOS
Díaz ha señalsado que el Ayuntamiento de Santander sigue velando por la conservación y el mantenimiento en buen estado de los edificios de la ciudad, con ayudas y acciones que van encaminadas a favorecer la reparación de los mismos y, paralelamente, eliminar los riesgos de aquellos inmuebles en estado ruinoso.
En este sentido, ha apuntado que se otorgan ayudas para la rehabilitación de fachadas de edificios catalogados, que se complementan con otras medidas impulsadas desde el Consistorio, entre ellas, los beneficios fiscales para aquellas comunidades de vecinos que quieran realizar este tipo de obras.
Además de ayudas económicas, el Ayuntamiento ofrece a los vecinos la posibilidad de acogerse a distintas bonificaciones fiscales como la exención del pago de la tasa por licencia de obras o la reducción del impuesto sobre construcciones en un 75 por ciento, todo ello, con el objetivo de mejorar el patrimonio edificado de la ciudad, ha señalado.