SANTANDER, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Economía y Hacienda del Gobierno de Cantabria, Ángel Agudo, ha defendido "lo público" para asegurar que la crisis "no afecte a la esencia del Estado del Bienestar" y garantizar también que el crecimiento futuro mantenga el sistema redistributivo.
"Esa parte inmensa de la población que necesita el apoyo de las instituciones y, en sus vidas, lo público es esencial debería confiar en los que creemos en el sistema redistributivo que paga los servicios públicos para salir de la crisis", manifestó Agudo, al tiempo que apostó por que "en los momentos de crecimiento, que los volverá a haber, vuelva a funcionar el sistema redistributivo para que "la red social no se pierda".
El consejero hizo estas declaraciones durante la inauguración del seminario 'Tres décadas de la economía española', organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica, en la Universidad Internacional Menéndez y Pelayo (UIMP), en la que ha participado, junto al secretario de Estado de Hacienda y Presupuestos, Carlos Ocaña; el presidente de BBVA, Francisco González; el rector de la UIMP, Salvador Ordoñez, y el presidente de la APIE, Miguel Ángel Noceda.
El consejero aseguró también que "la inversión y el gasto público son más penalizados por los mercados financieros porque vienen de ingresos y préstamos que se detraen de los recursos privados, y porque consideran que se destinan a cuestiones improductivas (sanidad, educación, gastos de estructura del estado,...) desde el punto de vista de puedan obtener retorno para pagarse".
"No quieren que su dinero pague bienes y servicios públicos improductivos porque con ese dinero improductivo se quitan recursos que podrían estar en la parte productiva (la privada), que propiciaría inversiones y gastos que, a su vez darán beneficios, y, por tanto, volverán a mover el sistema de recursos que dota adecuadamente al capital", explicó.
Tras esta reflexión, el consejero aseveró que "el sistema es lo que es", y se refirió "a los que animan a gritar contra lo público y chillan escandalosamente sobre su despilfarro y falta de austeridad". Aseguró al respecto que "el descrédito de la política y las instituciones que hay detrás de esos comentarios no ayuda en nada a salir de la crisis y de hecho incrementa el peligro".
Finalmente, el consejero aludió a los orígenes de la crisis que, en su opinión, "se centran en los excesos, que proporcionaron beneficios burbuja en etapas anteriores".