LAREDO, 21 Jun. (EUROPA PRESS) -
La asociación 'Amigos del Patrimonio de Laredo' ha valorado que el Fuerte del Rastrillar está "más cerca" de su declaración como Bien de Interés Cultural (BIC), después de que este lunes se haya publicado en el Boletín Oficial de Cantabria (BOC) la Resolución de la Dirección General de Cultura del Gobierno de Cantabria, aprobando la apertura e incoación del expediente para la declaración, como Bien de Interés Cultural (BIC).
Es un tramite que se desarrolla a instancias de una petición de esta asociación, que subraya que esta declaración permitirá a medio plazo que el citado conjunto patrimonial forme parte del inventario de bienes culturales declarados de nuestra comunidad autónoma.
"Confiamos que Laredo, pueda ver materializada esta declaración en el menor plazo de tiempo posible al objeto de contar en su haber, con un nuevo elemento patrimonial declarado, de alto valor e interés histórico cultural como es el Fuerte del Rastrillar", señalan.
Por eso, hacen un llamamiento al "esfuerzo y colaboración" al conjunto de las organizaciones, entidades e instituciones, así como particulares, para la preservación del patrimonio, la arquitectura y el paisaje.
Según recuerdan, el trámite tiene su origen en la solicitud presentada en marzo pasado ante la Consejería de Cultura, Turismo y Deportes del Gobierno de Cantabria por esta entidad asociativa, acogiéndose al procedimiento de petición contemplado en la propia Ley reguladora, sumándose con ello al acuerdo adoptado en idéntico sentido por el Ayuntamiento de Laredo, que asumió por unanimidad una proposición planteada para la declaración de BIC a favor del citado entorno patrimonial formulada por el grupo municipal socialista, en sesión plenaria de fecha 29 de septiembre de 2009.
De esta iniciativa de petición ejercida por la Asociación de Amigos del Patrimonio de Laredo, se dio traslado al propio consistorio municipal, a través del escrito dirigido a la primera autoridad local al que se aportaba copia del expediente informativo elaborado al efecto.
El acuerdo de incoación del expediente publicado en el BOC, cuenta con los informes preceptivos favorables de la Comisión Técnica de Patrimonio Edificado, así como de la Jefatura de Servicio de Patrimonio Cultural, siendo a partir de este instante cuando, por la propia Dirección General de Cultura se informará del mismo al ayuntamiento de Laredo al objeto que, esta Entidad Local emita la información técnica complementaria y valorativa que así estime, como paso previo y obligado a la posterior declaración como BIC.
Tal y como remarcan, "el mero hecho de incoación del expediente comporta para el bien afectado, la aplicación inmediata y provisional del régimen de protección previsto en la Ley 11/98 de Patrimonio Cultural de Cantabria, para los bienes ya declarados y, en este caso, para aquellos que vienen delimitados y catalogados en el entorno perimetral afectado por la declaración".
"En consecuencia, toda actuación urbanística en el entorno de protección, incluyendo los cambios de uso, en tanto no se haya aprobado la figura urbanística de protección del mismo, deberá ser aprobada por la Consejería de Cultura, Turismo y Deporte", advierten.
En el caso de que esté aprobado el instrumento de planeamiento del entorno afectado, dicha autorización de intervención competerá al propio Ayuntamiento, que deberá comunicar la intención de conceder la licencia a la citada con carácter previo a su concesión definitiva.
La colocación de elementos publicitarios e instalaciones aparentes en el entorno de protección señalado en el expediente de incoación, habrá de disponer, según fija la propia Resolución, de la preceptiva autorización del citado órgano administrativo del Gobierno de Cantabria.
EL FUERTE DEL RASTRILLAR
Se trata de un recinto parcialmente atrincherado que conserva aún restos de antiguas baterías de artillería, polvorín y edificaciones rehabilitadas de acuartelamiento, puesto de guardia y almacenes útiles de artillería, así como fortificaciones terreras que forman parte, junto con las ubicadas en el término municipal de Santoña, de las fortificaciones de esta bahía.
Ubicado en la Atalaya de Laredo, actual Parque Brigadier Diego del Barco, este fuerte cerraba la bahía frente a posibles ataques de barcos enemigos, junto con el Fuerte de San Carlos en Santoña, y el emplazamiento estratégico situado en El Puntal de la playa Salvé.
Estuvo en servicio hasta principios del siglo XX, y sus primeras edificaciones datan del siglo XVI.
Este entorno es objeto de rehabilitación desde finales de los noventa.
El fuerte alberga un conjunto de restos arquitectónicos de uso militar (baterías, pabellones, trincheras, polvorines), del cual se conservan murallas y distintos edificios.
En el sitio a que fue sometido en las postrimerías de la Guerra de la Independencia en 1814 por las tropas españolas, cayó, entre otros, el brigadier coruñés, Diego del Barco, cuyos restos reposan enterrados a los pies del Retablo de Nuestra Señora de Belén, en la iglesia de Santa María de la Asunción.
