(Amp)Huelga.- Médicos y anestesistas "suavizarán" el conflicto y atenderán a pacientes en situación de "urgencia social"

SANTANDER, 16 Feb. (EUROPA PRESS) -

El sindicato de Médicos de Cantabria (CESM) y el Sindicato de Médicos Anestesiólogos (SIMAC) anunciaron hoy que "suavizarán" en adelante la huelga médica indefinida que mantienen desde hace ya más de un mes en el Servicio Cántabro de Salud (SCS) y atenderán a aquellos pacientes que se encuentren en situaciones de "urgencia social" y no puedan "soportar más" la espera de asistencia.

No se trata por tanto de casos urgentes desde el punto de vista médico, ya que esos no se han dejado de atender en ningún momento, sino de situaciones que, "sin ser urgentes, les estén haciendo la vida imposible de sobrellevar a los pacientes" afectados.

Los propios profesionales serán los encargados de evaluar cuáles son los casos que responden a ese criterio de "urgencia social" que, según las previsiones de los sindicatos, afectará fundamentalmente a intervenciones quirúrgicas, pero no tanto a consultas.

De todas maneras, los sindicatos dejaron claro que "en ningún caso" esto implica una desconvocatoria de la huelga ni una "renuncia" a sus reivindicaciones, sino que se hace en "un ejercicio de responsabilidad" porque se está "llegando a un punto en el que el deterioro de la asistencia sanitaria se puede convertir en máximo".

En un comunicado conjunto leído esta mañana en rueda de prensa por el presidente del SIMAC, Carlos Díaz de Terán, en presencia del presidente de CESM, Javier Santiuste, ambos sindicatos explican que se suavizará el conflicto "de forma cautelar" en aquellos servicios en los que la actividad "esté sufriendo un deterioro que no pueda ser asumido por la población".

Para decidir qué casos o patologías son más difíciles de sobrellevar y pueden acogerse a esta "suavización" del conflicto se hablará entre los jefes de servicio y los responsables de quirófanos y anestesia en comités de valoración. Una vez decidido, y como ya se hizo en la huelga del año 95, serán atendidos, si es necesario por los propios profesionales que se encuentran en situación de huelga.

Díaz de Terán explicó que se pretende así "dar salida lo más rápido posible" a esos pacientes a los que la huelga está causando "sufrimiento, dolor o problemas de tipo social", y "disminuir la presión" de un conflicto "que está durando demasiado". Por su parte, Javier Santiuste aseguró que será "un balón de oxígeno para los pacientes", pero no para la Administración, con la cual el Sindicato Médico "endurecerá" su postura.

NEGOCIACIONES

Por lo que respecta a las relaciones con la Administración, el comunicado conjunto de los sindicatos emplaza al Consejo de Gobierno a "realizar las actuaciones necesarias con el fin de negociar con los comités de huelga para alcanzar el acuerdo que ponga fin a la misma, o en su defecto, a nombrar un mediador".

No obstante, también deja claro que ambas organizaciones tienen "autonomía total en lo relativo a las negociaciones, tanto en ritmo, como en estrategia negociadora". En el caso del Sindicato Médico, la postura sigue siendo de rechazo a los actuales interlocutores y confían en que la suavización del conflicto sea tenida en cuenta por el Gobierno y tome las medidas para que las mesas de negociación sean "efectivas".

Por lo pronto, "con los negociadores actuales y en esta situación" CESM no acudirá a las mesas, pero lo hará si le ofrecen una "alternativa que facilite la negociación".

SIN ACUERDO NO HAY DESCONVOCATORIA

La situación de SIMAC es más cercana a la de la Administración y sigue apostando por la negociación, pero lo que "no es posible", en palabras de su presidente, es desconvocar la huelga mientras no se termine de cerrar el acuerdo, como propuso esta mañana el director gerente del SCS, José Alburquerque.

Según dijo, la experiencia ha demostrado que "esta Administración sólo atiende las demandas de los profesionales cuando tiene un conflicto" y, sabiendo eso, el sindicato dice no poder desconvocar la huelga. "Desconvocaremos cuando lleguemos a un acuerdo", sentenció Díaz de Terán.

Recordó cuáles son las cuestiones que impiden de momento cerrar el acuerdo (el cómputo de los años de residencia como antigüedad y el reconocimiento de 'créditos de difícil justificación') y explicó que el sindicato ofrece posponer su aplicación hasta 2008 ó 2009, pero no renunciar a ello.

Finalmente, rechazó que la Administración apele a dificultades presupuestarias, cuando al Racing se le dio una subvención directa de dos millones de euros anuales durante diez años. A su juicio, con esos dos millones se "solucionarían" todas las reivindicaciones de los médicos.