La nueva ubicación amplía la superficie en 10.000 metros cuadrados y mejorará las condiciones de acceso y aparcamiento
SANTANDER, 31 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Museo de Cantabria será un museo de historia, centrado especialmente en la edad antigua y el arte paleolítico, y se ubicará seguramente al final de la vaguada de las Llamas, entre las bajadas de San Juan y de Polio. Aspira a convertirse en un museo "singular, posiblemente único en España", desde la convicción de que la apuesta por la especialización es la clave para atraer al público.
Así se acordó hoy en la reunión del consorcio para el Museo de Prehistoria, Historia y Arte Contemporáneo de Cantabria de cuyos contenidos dieron después cuenta a los medios de comunicación el presidente regional, Miguel Ángel Revilla; el alcalde de Santander, Íñigo de la Serna; el consejero de Cultura, Turismo y Deporte, Francisco Javier López Marcano, y el concejal de Cultura, César Torrellas.
Queda así definido el contenido del museo, en el que no habrá finalmente arte moderno, pero no se renuncia a crear un "gran museo de arte contemporáneo" que albergue la Colección Norte de la Consejería, los fondos del Museo de Bellas Artes y otros fondos que se consideren de interés.
En cuanto a la ubicación, el Ayuntamiento ha propuesto el traslado del Museo de Cantabria a una finca ubicada al final de la vaguada de Las Llamas, una idea que el Gobierno ve "lógica y coherente" y que supondrá ganar unos 10.000 metros cuadrados más de superficie para el proyecto.
Las dos partes se ponen ya manos a la obra y técnicos de ambas administraciones estudiarán el nuevo emplazamiento para analizar sus posibilidades. Además, se trasladarán también los cambios al equipo de arquitectos Mansilla y Tuñón, ganadores del concurso de ideas para el diseño del Museo, para que estudien, en su caso, la adaptación del proyecto a los nuevos acuerdos sobre contenido y ubicación.
La voluntad de Ayuntamiento y Gobierno es agilizar todo el proceso para iniciar las obras "cuanto antes" con el fin de que el Museo llegue a ser una realidad en esta legislatura.
UBICACIÓN.
La nueva ubicación sugerida por el Ayuntamiento abarca una superficie de 26.000 metros cuadrados, frente a los 16.000 metros del emplazamiento inicialmente señalado. Esa ampliación de superficie permitirá, entre otras cosas, mejorar las condiciones de acceso y ganar espacio para poder dotar de aparcamientos al Museo, una opción que resultaba complicada si se mantenía su construcción en la zona central de la vaguada.
Además, según explicó De la Serna, se evita la "aglomeración de infraestructuras" y la división del parque de Las Llamas prácticamente en dos que se produciría si se construía el Museo en la zona central, donde se encuentra ya el campus universitario y donde se proyecta además la Casa del Estudiante y el puente entre la S-20 y la avenida de Los Castros.
Para conseguir todos los terrenos habrá que negociar con los propietarios de tres "pequeñas parcelas", pero Revilla no prevé dificultades porque el Plan General las clasifica para usos dotacionales. El Ayuntamiento iniciará en breve ese trabajo para buscar el acuerdo y el presidente regional confía en que llegue "a buen término".
Revilla consideró "absolutamente lógica y coherente" la ubicación planteada por el Ayuntamiento; y De la Serna, por su parte, felicitó al presidente porque, "en política, a veces, se puede tener la tentación de ir a lo inmediato y a lo fácil, sin reflexionar sobre la idoneidad de las soluciones planteadas" y en el día de hoy se ha hecho un "ejercicio de rigor y de seriedad para plantear una clara posición de futuro y de visión de futuro" sobre la ubicación del Museo.
CONTENIDOS.
En cuanto a los contenidos, el alcalde opinó que la decisión adoptada es "lo mejor" para Cantabria y para Santander, para conseguir un "museo de referencia" que "diferencie" la oferta cántabra sobre la que presentan otras ciudades y regiones. De ahí que se haya optado por un museo sobre la historia, con un capítulo muy importante dedicado a la historia antigua y, dentro de ella, al arte paleolítico.
Además, espera que tenga espacio en ese mismo museo el Instituto Internacional de Investigaciones Prehistóricas, de forma que se consiga aunar en él la parte expositiva y la de investigación.
También coincidió Revilla en la importancia de diferenciar la oferta y contar así con un museo "singular, posiblemente único en España", para poder ejercer así una atracción hacia un público cada vez más interesado por el arte paleolítico. "Museos de arte contemporáneo en España hay muchos y es difícil competir. Ahora, en lo que no puede competir nadie con nosotros es en arte antiguo y paleolítico", sentenció.
ARTE CONTEMPORÁNEO.
De todas maneras, el hecho de dedicar al Museo de Cantabria a la historia no significa que se olvide la posibilidad de potenciar en Santander un "gran museo de arte moderno y contemporáneo" que, en palabras del alcalde, incluya los fondos del museo municipal, los de la Colección Norte y otros que se puedan considerar de interés. La ubicación, en ese caso, tendría que mantenerse en el espacio actual, con la ampliación del Museo de Bellas Artes con las instalaciones adquiridas por el Gobierno de Cantabria en las inmediaciones.
En esta línea, el consejero de Cultura señaló que el consorcio hace suya la "aspiración" de mejorar las condiciones del actual Museo de Bellas Artes, cuya ampliación se afrontará con los 1.200 metros cuadrados adquiridos por la Consejería en la calle Cisneros, que permitirán "doblar" las dimensiones actuales.
López Marcano resaltó la "especial relevancia" del día de hoy para la política museística de la ciudad y consideró que el arte paleolítico, la ciudad y la región están "de enhorabuena", "pero el arte contemporáneo también", porque el consorcio "encamina sus esfuerzos a la construcción de un museo, pero también a la mejora muy sensible del Museo de Bellas artes".
