SANTANDER, 13 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Nacional ha condenado por tráfico de drogas a dos cántabros a siete y ocho años de cárcel, así como al pago de sendas multas por importe de 4,3 y 8,6 millones de euros, como miembros de una red que importó 261 kilos de cocaína desde Colombia ocultos en un contenedor, en una operación en la que varios policías nacionales actuaron como agentes encubiertos.
En total son ocho las personas condenadas, con penas que suman 49 años de cárcel y más de 51 millones de euros en multas, según consta en la sentencia de la Audiencia Nacional, a la que ha tenido acceso Europa Press.
Los dos condenados cántabros, de nombre Teodulfo, nacido en Castro Urdiales en 1966, y José Pedro, nacido en Santander en 1977, se consideran importadores de la cocaína, ya que junto con otras dos personas se encargaron de adquirirla, concertar el transporte marítimo desde Cartagena de Indias -en un contenedor de polipropileno-, conseguir un paso seguro por la aduana en el puerto de Algeciras y su traslado hasta un almacén en Alovera, Guadalajara, donde repartir la droga.
La Audiencia Nacional, que establece tres niveles en cuanto al merecimiento de penas, sitúa a Jose Pedro en el primero de ellos, junto a otros dos de los condenados, a los que impone ocho años de cárcel y multa de 4,3 millones de euros.
Y en el segundo nivel sitúa a Teodulfo, que proveyó a los tres primeros de una entrada segura por la aduana, "pagando un servicio que implicaba necesariamente la compra de la voluntad de alguna persona relacionada con esa esfera". Su condena es de siete años de prisión y 8,6 millones de euros de multa.
La persona a la que pagó por ese "servicio" resultó ser un policía encubierto, al que Teodulfo desveló sus planes creyendo que era "un particular con contactos en las aduanas", y le entregó 25.000 euros como pago anticipado por facilitarles el acceso por el puerto de Algeciras.
La Audiencia Nacional aplica la pena del tipo agravado de extrema gravedad por simular operaciones de comercio internacional entre empresas. José Pedro y otros dos de los condenados adquirieron una sociedad constituida e inactiva para dar apariencia de comercial a la importación internacional de contenedores con polipropileno.
Entre los meses de marzo y abril de 2009 importaron tres contenedores, ocultado en el interior de uno de ellos 261 kilos de cocaína con una pureza media del 75,3% y un valor en el mercado de 8,6 millones de euros.
Del resto de los condenados dos son originarios de Asturias (Taramundi y Oviedo), uno de Valencia (Sagunto), otro de Vizcaya (Las Carreras) y también hay un rumano.