Avanzan a buen ritmo las obras del bitrasvase, que con la Autovía del Agua, garantizará el suministro del "siglo XXI"

Actualizado: miércoles, 5 abril 2006 18:15

El presidente de la CHN y la vicepresidenta del Gobierno de Cantabria visitaron hoy los trabajos

SANTANDER, 5 Abr. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Confederación Hidrográfica del Norte (CHN), Jorge Marquínez, la vicepresidenta del Gobierno, Dolores Gorostiaga, el delegado del Gobierno, Agustín Ibáñez y el consejero de Medio Ambiente, José Ortega, visitaron hoy las obras del bitrasvase Ebro-Besaya-Pas, un proyecto que avanza a buen ritmo, según lo previsto, y que junto con la Autovía del Agua, permitirá solucionar el próximo año los problemas de suministro que padecía la región y garantizar el abastecimiento "para el siglo XXI".

La inversión prevista es de 101 millones de euros, incluyendo el pago de las expropiaciones. Las autoridades visitaron los trabajos de la primera fase, adjudicados a la empresa FCC con un presupuesto de 69 millones de euros que financia en un 75% el Ministerio de Medio Ambiente y en un 25% el Gobierno de Cantabria. La finalización de la primera fase está prevista para mayo de 2007, aunque durante la visita los técnicos indicaron que estará concluida para febrero.

El proyecto de mejora de abastecimiento de agua a Cantabria a través del bitrasvase Ebro-Besaya-Pas pretende asegurar el suministro de agua a diversas comarcas de la región durante el verano -fundamentalmente Santander y Torrelavega pero llegado el caso también las zonas oriental y occidental a través de la Autovía del Agua-, así como garantizar un caudal medioambiental de los ríos Pas y Besaya para salvaguardar la vida piscícola en dichos cauces fluviales.

Para conseguir este doble objetivo, en invierno se captará agua en tres puntos del río Besaya procedente de los caudales excedentarios y medioambientales. Ese caudal se almacenará en el pantano del Ebro y servirá para abastecer en verano a las comarcas de Santander y Torrelavega, consiguiendo así un "balance neto equilibrado" a través de la regulación de caudales en la cuenca norte. El equilibrio o "balance cero" del trasvase "tiene que alcanzarse en cuatro años".

26 HECTOMETROS CUBICOS

El presidente de la CHN anunció que ya se ha aprobado el modificado que va a permitir aumentar hasta 26 hectómetros cúbicos -a petición del Gobierno de Cantabria- el caudal máximo del bitrasvase, de forma que el sistema de abastecimiento será capaz de atender los "picos" de demanda de agua que se producen durante el periodo estival.

Todas las autoridades coincidieron en destacar el buen ritmo al que avanzan las obras. No obstante, el presidente de la Confederación aseguró que aunque el ritmo es "razonable", todavía no le satisface del todo, por lo que la sociedad estatal Aguas de la Cuenca del Norte (ACUNOR), que gestiona la inversión, está revisando su estructura para lograr una mayor eficacia tanto en el cumplimiento de plazos como en la calidad técnica del proyecto.

Además, explicó que la empresa pública acaba de crear una dirección ambiental, independiente de la dirección técnica, a la que ha encomendado una nueva revisión ambiental de la obra para "identificar cualquier posible mejora", de forma que sea una actuación "ejemplar desde todos los puntos de vista". La CHN quiere finalizar la obra "con un poco de margen" para poder cumplir los plazos y así no depender de las condiciones climatológicas o de "apuros de última hora".

Según Marquínez, en la parte próxima al pantano del Ebro la obra está ejecutada en un 80%, pero en las zonas media y baja va "más retrasada". Por su parte, Gorostiaga subrayó que los trabajos están "más avanzados" de lo que pensaba y destacó que antes de que acabe la legislatura (a mediados de 2007), se habrán resuelto definitivamente los problemas de abastecimiento de agua en Cantabria.

DE INTERÉS GENERAL

La vicepresidente recordó que el bitrasvase es una obra que "se declaró de interés general por un Gobierno socialista y otro Gobierno socialista tiene la suerte de desarrollar", y destacó además que los 200 millones de euros del Fondo de Cohesión que el Estado ha prometido a Cantabria permitirán "acelerar los plazos y acabar antes" la Autovía del Agua, que se conectará con el bitrasvase.

Por su parte, el delegado del Gobierno afirmó que el bitrasvase solucionará los problemas de agua "para los próximos 25 años". Sin embargo, el consejero de Medio Ambiente aseguró que el suministro está garantizado para los próximos "30 o 40 años", "pero tal y como se configura todo el sistema, me atrevo a decir que para el siglo XXI", apostilló.

Añadió que en una legislatura, el Gobierno va a dar la "vuelta" al problema del abastecimiento y lo va a convertir en un "potencial", al tiempo que resaltó la "sensibilidad" del Ministerio de Medio Ambiente y la CHN tanto para cumplir los plazos como para atender "el más mínimo detalle de carácter ambiental".

El consejero explicó que cuando las obras del bitrasvase estén "más avanzadas" habrá que negociar con el Ayuntamiento de Santander la conexión de esta infraestructura con las captaciones municipales del Pas, para lo que ya se han establecido contactos con el Consistorio por parte de la Consejería y de la CHN, añadió.

CARACTERÍSTICAS DE LA OBRA

La primera fase del bitrasvase, actualmente en ejecución, consiste en la construcción del sistema denominado 'Abastecimiento de Agua a Cantabria', que suministrará agua bruta a los actuales sistemas de abastecimiento de Santander (La Molina) y Torrelavega (Las Fraguas).

Consta de una conducción de 55 kilómetros capaz de transportar los caudales previamente almacenados en el embalse del Ebro hasta las instalaciones de cabecera de los sistemas municipales y sus áreas de influencia urbana en los meses de estiaje. También se incluyen las conducciones y estaciones de elevación necesarias para transportar los volúmenes de agua objeto de la regulación desde los ríos de la cuenca norte al embalse del Ebro, para conseguir un balance hidráulico anual nulo.

Para lograr este fin se ha planeado la construcción de una serie de captaciones en ríos de la cuenca norte que, mediante estaciones de bombeo, impulsarán los recursos excedentes hasta el Embalse del Ebro. Posteriormente, el volumen almacenado será devuelto en función de la distribución de las demandas a lo largo de los meses deficitarios.

La segunda fase consiste en la construcción de una red de conducciones para el abastecimiento de agua a las comarcas costeras orientales de Cantabria. Este sistema equilibrará los recursos de las distintas unidades de explotación hidráulica de la Comunidad Autónoma de Cantabria, constituyéndose como un "sistema de abastecimiento unificado". El sistema está formado por una conducción de 29 kilómetros de longitud, dividida en cuatro tramos, entre Astillero (en las cercanías de Santander) y Argoños (en las cercanías de Santoña).

En la actualidad ya se han ejecutado más de 10 kilómetros de canalizaciones, la toma de Aguayo y el azud de Junto Urbán -visitado por las autoridades- (que permite la llegada de agua a la estación de bombeo). A día de hoy, paralelamente a la construcción de la canalización, se está trabajando en el azud y bombeo del Hirvienza, en el depósito del Hirvienza y en el depósito del Besaya.