CSI-F se reúne mañana con los grupos parlamentarios para que incluyan ayudas sociales para empleados públicos

Europa Press Cantabria
Actualizado: miércoles, 18 noviembre 2009 18:18

SANTANDER 18 Nov. (EUROPA PRESS) -

CSI-F mantendrá mañana, día 19, una reunión con los tres grupos parlamentarios (PP, PRC y PSOE) con el objetivo de exponer las razones de su rechazo a la decisión del Gobierno regional de suspender durante 2010 la aplicación de las ayudas sociales para los casi 30.000 empleados públicos, "algunos de los cuales son mileuristas", y que los grupos "tomen conciencia del perjuicio que esta decisión supone", de modo que incluyan las ayudas en el presupuesto.

El sindicato, que recordó que estas ayudas sociales están contempladas en el Acuerdo Administración-Sindicatos 2008-2011 suscrito el pasado año, resaltó que la no inclusión en los Presupuestos Generales de Cantabria (PGC) de 2010 de una partida para tal fin ha sido una "decisión unilateral" del Ejecutivo cántabro, al tiempo que mostró su preocupación por la pérdida de capacidad adquisitiva de los empleados públicos que, en algunos casos, "cobran salarios bajos".

El encuentro, al que asistirán el presidente de CSI-F en Cantabria, José Miguel Zorrilla, y el coordinador del sector Autonómico, Eduardo Rubalcaba, fue solicitado por el sindicato la pasada semana tras conocerse la decisión del Gobierno cántabro de suprimir las ayudas sociales en el transcurso de la Mesa General de los empleados públicos del 23 de octubre.

CSI-F recordó que 2010 "también será un año difícil para los empleados públicos" y que entre el conjunto de ayudas que se quedarán sin dotación presupuestaria figuran algunas como las previstas para la formación de los empleados o las de guardería para los trabajadores con hijos menores de tres años lo que, entre otras cosas, "dificultará la conciliación de la vida laboral y familiar".

Zorrilla subrayó que el sindicato "luchará" para que durante la tramitación parlamentaria del presupuesto de Cantabria 2010 el Gobierno regional corrija esta "injusta medida", y recordó que el acuerdo que ahora se rompe "de forma unilateral" fue "fruto del consenso, el diálogo y la buena fe".

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