El proyecto definitivo fue presentado hoy por el presidente de la Autoridad Portuaria, el alcalde y el consejero de Obras Públicas SANTANDER, 28 Abr. (EUROPA PRESS) -
Cuestiones de índole económico y técnico han obligado a optar por otro diseño para el puente móvil de Raos, por el que se canalizará el tráfico pesado portuario que actualmente discurre por las calles Castilla y Marqués de la Hermida. Está previsto que las obras, licitadas esta semana con un plazo de ejecución de 18 meses, comiencen el próximo mes de octubre, de forma que el puente se pueda inaugurar en marzo de 2008.
El puente, por el que también discurrirá el ferrocarril, lo que le hace único, tiene una longitud de 273 metros. El proyecto definitivo de esta infraestructura que unirá los muelles de Maliaño y Raos, tendrá un coste de más de 15 millones de euros, inversión que será financiada a partes iguales (el 25% cada una) por el Ayuntamiento de Santander, la Autoridad Portuaria, el Gobierno de Cantabria y el ente Puertos del Estados, dependiente del Ministerio de Fomento.
El proyecto, redactado por el estudio de ingenieros Martínez Calzón, fue presentado hoy en rueda de prensa por el presidente de la Autoridad Portuaria, Javier del Olmo; el consejero de Obras Públicas del Gobierno regional, José María Mazón; y el alcalde de Santander, Gonzalo Piñeiro.
Del Olmo explicó que los cambios introducidos en el proyecto original responden por un lado a razones de tipo económico, ya que el primer proyecto "excedía de forma notable" del presupuesto acordado entre las administraciones; y por otro lado existían "dudas sobre los elementos de construcción".
En este sentido, señaló que las operaciones de subida y bajada de las hojas móviles del puente son "extremadamente complejas" pero con las características constructivas elegidas resultarán "más sencillas", hasta el punto de que una operación de subida y bajada sólo durará cinco minutos.
"FUNCIONALIDAD Y LIGEREZA"
Por su parte, el consejero de Obras Públicas destacó que este proyecto supondrá "un avance extraordinario" para la ciudad de Santander y desde el punto de vista constructivo valoró muy positivamente su "funcionalidad y ligereza", de tal forma que "se integra perfectamente en el paisaje", dijo. También destacó el "mérito" que tiene, en su opinión, tanto el diseño como el sistema constructivo. A su juicio, el proyecto inicial "se ha mejorado desde el punto de vista técnico y funcional".
Mientras tanto, el alcalde de Santander mostró su satisfacción por el nuevo paso dado en la ejecución de un proyecto por el que el Ayuntamiento lleva "luchando -dijo- desde hace cuatro años".
En este sentido, recordó que fue el Consistorio quien en 2002 planteó a la Autoridad Portuaria la necesidad de buscar una solución para eliminar los aproximadamente 200 camiones diarios que entran y salen por Marqués de la Hermida y la calle Castilla y más de un ferrocarril diario, recuperando ese espacio para uso público sin interferir en la actividad del puerto.
Además, destacó que el Ayuntamiento no sólo "lideró" el proyecto sino que se ha comprometido a financiar el 25% de la inversión pese a que no se trata de una competencia estrictamente municipal.
CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS
El puente proyectado consiste en la disposición en la dársena de Maliaño de un tramo basculante de dos hojas, de 46,50 metros de longitud total cada una, que se completa con dos tramos de acceso fijos, uno a cada lado del tramo basculante, con luces aparentes de 84 metros cada una, para completar, en conjunto con los grandes recintos dispuestos entre tramos, una longitud total de 273 metros entre ejes de apoyos en estribos.
La anchura total del paso marítimo entre paredes de los recintos es de 62 metros, lo cual permite el acceso y el cambio de orientación producida en la zona del puente por los barcos que faenan desde la citada dársena.
La tipología considerada para el conjunto del puente es de carácter híbrido. Es decir, combinación apropiada de determinadas tipologías y características. El tramo móvil basculante, totalmente centrado en la línea de bocana, consistente en una solución metálica en viga cajón con tablero superior ortótropo y canto suavemente variable entre las zonas extremas y clave.
La solución adoptada para el tramo móvil corresponde a la disposición basculante. Es decir, dos hojas apoyadas en sendas parejas de rótulas con unas dimensiones de 36 metros para las zonas voladas y de 10,5 metros para las zonas dorsales o de culata.
Los tramos de acceso conectarán cada muelle con los recintos de maquinaria ubicados en los extremos del tramo móvil y consisten en sendas vigas mixtas en cajón, empotradas elásticamente en los extremos correspondientes a dichos recintos, y simplemente apoyadas en los extremos situados en los muelles. La plataforma de estos tableros consiste en una losa de hormigón conectada a las almas de la pieza metálica en cajón semiabierto.
Los tramos de acceso y móviles irán apoyados sobre recintos de hormigón armado, cimentados sobre pilotes. La plataforma del tablero presenta una anchura total de 15 metros, de los cuales los 1,88 metros centrales corresponden a la zona destinada para la vía férrea de doble hilo en ambos carriles.
De estos, 3,81 metros a cada lado de dicha vía constituyen las calzadas del tráfico automóvil, completadas a uno y otro lado con una anchura de 0,50 metros para la disposición de las defensas laterales de tráfico. En el exterior de las mismas se sitúan sendas aceras peatonales de 2,25 metros de anchura, rematadas por las correspondientes barandillas de protección exterior.
