SANTANDER, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Santander aprobará el lunes, 23 de febrero, la licitación del 'cerebro' de la SmartCity por un presupuesto de 2,2 millones de euros y plazo de cuatro años para su desarrollo e implantación.
Este 'cerebro' será una plataforma tecnológica que permitirá realizar una gestión integral de los servicios municipales de Santander, que incluso, en un futuro, podrán llegar a interactuar entre sí.
El alcalde, Iñigo de la Serna, ha anunciado este viernes en rueda de prensa esta actuación, que se alzará como "el paso más importante de cuantos se han dado" en el desarrollo de Santander como ciudad inteligente y que será la mayor inversión en I+D+i realizada por el Ayuntamiento hasta el momento.
Como ejemplo de lo que este 'cerebro' podrá llegar a hacer en el futuro, De la Serna ha indicado que, en el caso de que se rompiese una tubería en General Dávila, la plataforma podría de forma automática "dar el aviso a Aqualia, cambiar la semaforización para evitar atascos, cambiar la ruta de los autobuses o incluso enviar mensajes para informar a los vecinos afectados".
Todo ello gracias a la sensorización y monitorización de la tecnología desplegada por los diferentes servicios urbanos y que en estos momentos Santander ya tiene implantada en los de recogida de residuos urbanos, aguas, alumbrado público, tráfico, parques y jardines y transporte urbano.
No obstante, el 'cerebro' inicialmente será "como el de un niño" y tendrá que "ir nutriéndose" de tecnología hasta alcanzar la "inteligencia" que le permita tomar esas decisiones automáticas en las que tenga en cuenta todos los servicios implicados en una determinada acción o afectados por una avería.
MEJOR GESTIÓN Y MÁS EFICIENCIA
De la Serna ha destacado que esta plataforma no sólo mejorará la gestión de los servicios y su eficiencia, sino que incrementará la calidad de vida de los vecinos y ofrecerá oportunidades para empresarios y emprendedores que, con la información de este 'cerebro', podrán crear nuevos servicios o aplicaciones.
El pliego de condiciones para la adjudicación es "muy complejo" --técnicos y servicios jurídicos del Ayuntamiento han estado meses trabajando en su elaboración-- pero, en resumen, exige la construcción del 'cerebro' y la creación de una oficina técnica, que vaya conectando todos los servicios y haga un seguimiento de los mismos.
Todo ello se debe implantar en tres fases: una primera de tres meses en la que se planteen los servicios que se van a conectar --el Ayuntamiento ha fijado como prioritarios 14--; otra segunda, también de tres meses, para implantar la plataforma y tener un plan de trabajo sobre cómo se van a ir agregando los servicios; y una tercera, hasta completar los cuatro años, en la que se irán añadiendo todos los servicios municipales.
El alcalde ha explicado que con este 'cerebro' lo que se busca es contar con un "centro de operaciones" que "controle y actúe de forma transversal" sobre todos los servicios que estén conectados al 'cerebro', de forma que el conjunto de la ciudad pueda llegar a funcionar de "manera predictiva".
"Estaremos a la cabeza de la gestión inteligentes de una ciudad con la puesta en marcha de este proyecto", ha afirmado De la Serna, que ha asegurado que "no hay nada más moderno y más avanzado que esto" en materia de smart cities. "No hay ninguna ciudad en el mundo que tenga algo parecido", ha apostillado.
OFICINA TÉCNICA Y LABORATORIO DE EXPERIMENTACIÓN
La Oficina Técnica que tendrá que crear la empresa que resulte adjudicataria para el desarrollo de este 'cerebro' tendrá que contar con al menos cuatro trabajadores a tiempo completo, un director y tres analistas-desarrolladores.
Además, debe crear un Laboratorio de Experimentación e Innovación, en el que todos aquellos ciudadanos, empresas o emprendedores que quieran "sacar jugo y rendimiento" a la información del 'cerebro' con la creación de nuevos servicios o aplicaciones.
Este Laboratorio también tendrá que ayudar en el posicionamiento del sector empresarial, así como tratar de atraer empresas extranjeras para su implantación de la ciudad.
Asimismo, la empresa adjudicataria estará obligada a organizar eventos y campañas de difusión, impartir cursos de formación a los empleados municipales, comenzando por el personal técnico, de atención al ciudadano, de gestión de los servicios o administración.