SANTANDER, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
Efectivos de la Policía Nacional detuvieron el pasado día 4 al portero de un club de las afueras de Santander, como presunto autor de dos agresiones cometidas a lo largo de la misma noche, en concreto, la del 19 de febrero.
Los hechos sucedieron entre las once de la noche y las primeras horas de la madrugada, y el detenido justificó las lesiones aseguran que las víctimas le habían insultado y estaban molestando a las mujeres del club.
En cambio, los lesionados, que fueron asistidos en el Hospital Valdecilla, aseguraron que recibieron los golpes sin que mediara motivo alguno, según informó la Policía Nacional.
Así, el primero de ellos denunció que cuando se marchaba del local hacia su casa, el portero le golpeó, haciéndole caer al suelo. En ese momento, otros empleados del club le ayudaron y le invitaron a una consumición para que no dijera nada.
Horas después ocurría la segunda agresión. Dos amigos se encontraban tomando una copa, y fueron interrumpidos por el portero, que les recriminó que su comportamiento era inadecuado, por lo que les sacó del local y les agredió, golpeándoles cuando se encontraban en el suelo.
En su declaración, el portero aseguró que era cliente del club, y no portero, pese a que la policía comprobó que si actuaba como tal. El detenido les dijo que cuando estaba allí vio a varios hombres que molestaban a las empleadas y, al salir con ellos a la calle, le intentaron atacar, por lo que se defendió.
El portero quedó en libertad con cargos, a disposición del juez de guardia.
