SANTANDER, 5 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Cantabria, Ignacio Diego (PP), ha asegurado este lunes que el peligro de colapso de Cantabria es "tan real como la vida misma" porque se ha gastado una cuarta parte del presupuesto de más durante los últimos cinco años.
"Una familia que gasta una cuarta parte de su sueldo de más durante cinco años seguidos va a parar a la ruina. Y esa es la situación financiera en la que se encuentra Cantabria", ha aseverado el presidente en una entrevista en la Cadena Ser, recogida por Europa Press, en la que también ha afirmado que los empleados públicos regionales conocen la situación.
No obstante, Diego ha manifestado que se puede reducir el déficit regional 2,5 puntos aunque "no sin sacrificio". De hecho ha recordado que esta tarde comparece en el Parlamento para explicar cómo el Gobierno va a disminuir los gastos e incrementar los ingresos para reducir el desajuste en 157 millones, una cifra que confía sea "suficiente" para "comenzar a reencaminar la economía de Cantabria hacia la viabilidad, no hacia el florecimiento".
"Con esto voy a intentar que la economía de Cantabria sea viable desde el punto de vista financiero, no colapse, y podamos seguir pagando nóminas, atendiendo a las prestaciones básicas...", ha apostillado.
Por otra parte, ha avanzado que "probablemente" lleve a los tribunales "cosas muy puntuales y concretas" del Gobierno anterior, al ser preguntado si se ha planteado denunciar al Ejecutivo PSOE-PRC por cuestiones como la deuda farmacéutica de los hospitales, que asciende a 261 millones de euros.
El titular del Gobierno regional ha precisado que las 83.000 facturas que han quedado "sin reconocer", algunas con más de dos años de antigüedad, que estaban "metidas en cajones del Servicio Cántabro de Salud", no se pueden acometer con unos ingresos "que no llegan a 2.000 millones de pesetas" y a los que hay que sumar los 490 millones que Cantabria debe devolver al Estado, además de corregir el déficit.
"Eso es denunciable desde el punto de vista político y moral", ha asegurado, matizando que desde el punto de vista penal "no está considerado en ningún momento delito penal". "Y yo no soy quién para llevar (a los tribunales), salvo cosas que veas que se han hecho con mala fe y dolo para la Administración. Y alguna he visto y probablemente alguna lleve, pero serán cosas muy puntuales y muy concretas", ha declarado.
REFORMULAR LA SANIDAD Y LA GESTIÓN DE LOS MUNICIPIOS
En otro ámbito, Diego se ha mostrado partidario de reformular aspectos del Estado de las Autonomías, porque si bien ha generado "mucho progreso y bienestar", en los últimos cinco años se ha evidenciado como "un sistema no equilibrado". En su opinión deberían analizarse ciertas competencias que se han transferido a las autonomías sin suficiente dotación económica o que las comunidades han hecho insostenibles económicamente por su forma de gestionar, como la sanidad.
Para el presidente, garantizar la sanidad y hacerla avanzar pasa porque el Estado asuma el liderazgo en este aspecto que ya con el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero reveló que tenía "deficiencias de financiación en todas las administraciones públicas", un problema en que el anterior presidente "no quiso estar" y una de las "muchas chapuzas" que el Gobierno de Zapatero ha dejado a la Administración de Mariano Rajoy.
"Pido un esfuerzo de liderazgo al Estado para que coordine a las comunidades autónomas para que todas, que comparten el mismo problema, busquen fórmulas compartidas que den viabilidad a los sistemas autonómicos de salud pública", ha explicado.
Por otra parte, Diego ha considerado que si bien Cantabria no tiene exceso de municipios (102), sí debe gestionarlos de manera diferente, como el resto de autonomías. Pero ha subrayado que eso no supondría eliminar municipios porque sería entrar en un ámbito "muy delicado" como la "sensibilidad y los orgullos".
"Ahora no estamos para perder el tiempo con esas cosas y sí para hacer viables los ayuntamientos que en algunos casos tampoco lo son", ha subrayado, explicando que la solución es compartir servicios porque así se abaratan costes y se consigue la viabilidad económica.
RACING
Por otra parte, Diego ha dicho que quiere "pensar" que no hay peligro de que desaparezca el Racing a final de temporada. "Quiero pensar que no, que el Racing tiene futuro", ha declarado, y en este sentido ha confiado en que "se pueda dar una solución" a su problema societario.
Para el presidente, el "partido más difícil del Racing" no está en el terreno de juego sino "en los despachos de los abogados y del Club" porque el Gobierno anterior le hizo un "flaco favor" al firmar el contrato con Ali Syed, del que deriva una situación jurídica "muy compleja".
Esta situación societaria hace que "se vayan sin más" las "muchas empresas y personas" que se interesan por el Racing, "un equipo de fútbol muy atractivo porque no tiene una deuda muy grande y está jugando en Primera División".
COLEGIOS DEL MUNDO Y PLAN EÓLICO
En otro orden, el presidente ha calificado como "muy curioso" el proyecto de Colegios del Mundo Unido, puesto que "los defensores a ultranza de la educación pública jamás dijeron nada" de esta iniciativa "absolutamente" privada, "de cierta elite", que el Gobierno de Cantabria iba a sufragar "al cien por cien", según el contrato que firmó el anterior "Gobierno socialista".
"Curiosamente, los sindicatos de la enseñanza pública jamás dijeron nada de este proyecto educativo que iba a costar 58 millones de euros", ha observado Diego, para quien la decisión de la fundación que lo gestiona de no seguir adelante ha sido "muy realista". "No se puede sacar adelante en este momento ese proyecto", ha afirmado.
En cuanto al desarrollo eólico, ha manifestado que en los ocho meses que lleva gobernando Cantabria, el Ejecutivo no ha tomado "ninguna decisión, ninguna en absoluto" que afecte al mismo, "ni para bien ni para mal". Ha señalado que el plan eólico del anterior Ejecutivo era una "chapuza jurídica notabilísima", que llevaba a una "inseguridad jurídica total" a los inversores, que han decidido "parar y esperar".
En este sentido, ha subrayado que "no hay nada que les impida hacer lo que el Gobierno anterior dejó hecho", pero no siguen adelante por "sentido común y prudencia".